Selección mexicana: ¿mal juego y
buen negocio?
Forbes - lunes, 16 de junio
de 2014
A pesar de la importancia de los
equipos europeos a nivel mundial, apenas están en el intento por desarrollar un
modelo de negocios similar al de los equipos mexicanos.
En el juego que disputan los
equipos de futbol nacionales en la cancha de los negocios poco importan las
críticas que se ciernen sobre un nivel futbolístico mediocre. En la
mercadotecnia, el futbol mexicano anota todos los goles: la venta de sus marcas
puede ser mejor que Brasil, Argentina e incluso que el de los clubes europeos.
“Si bien el modelo tiene muchos
errores o tiene muchas áreas de mejora, ha podido consolidar una liga y una
selección nacional que no corresponden a la realidad de la economía mexicana,
es decir, hemos podido salir de la caja y ser competitivos a nivel mundial”,
asegura Javier Salinas, director de Mercadotecnia y Comercialización de la Liga
Bancomer MX.
Hace 3 años, la liga mexicana de
futbol tenía un valor en términos de mercadotecnia que alcanzaba los 40,000
millones de pesos (mdp), el cual se ha incrementado en últimas fechas en cerca
del 20 y 35%, con lo que hoy alcanzaría un monto máximo aproximado de 54,000
mdp.
El patrocinio de Bancomer en la
liga, así como las inversiones de los clubes y el incremento en los pagos de
los derechos de transmisión, son los elementos que, de acuerdo con Salinas, han
aumentado la plusvalía del juego.
Frente a este panorama, los
únicos adversarios de peso que se perfilan para el futbol mexicano son las
empresas que ofertan otras opciones de entretenimiento, como pueden ser las
compañías de cine o de teatro, además de las telenovelas que presentan las
televisoras.
El silbatazo está dado para el
balompié nacional en su encuentro en la cancha de los negocios y se prepara para seguir creciendo, a pesar
de las zancadillas que la economía mexicana pueda propinarle.
Los modelos mexicanos
Mucho se habla del bajo nivel
futbolístico de México, pero poco se habla de que México es líder en la
comercialización de los equipos y sus marcas.
“Lo que han logrado hacer los
equipos es entender al cliente mexicano”, dice Javier Salinas. La participación
de cadenas de televisión y de las empresas patrocinadoras ha logrado generar un
negocio redituable para los equipos, alejándolos de los malos resultados
financieros cada año, explica.
Las principales fuentes de
ingreso que permiten visualizar un negocio saludable son:
“Los mayores ingresos vienen de
los derechos de transmisión. Hoy el futbol mexicano está teniendo ingresos por
derechos de televisión que antes no tenía. Con la globalización del futbol las
transmisiones del deporte mexicano empiezan a llegar a otros países como
Sudamérica y Centroamérica”, opina Julián Sánchez, académico del Instituto
Panamericano de Alta Dirección de Empresas (IPADE Business School).
El futbol europeo es modelo de
buen juego, pero sus equipos no son tan excelentes para hacer negocios. Muchos
se han encontrado en medio de crisis de rentabilidad, como es el caso del
Manchester City, que perdió 227 millones de euros en la temporada 2010-2011,
colocándose como el club con mayores
pérdidas en la historia del balompié inglés.
Pero, los equipos nacionales se
han distinguido por la diversificación en sus fuentes de ingreso en una
multiplicidad de modelos de negocio que guardan las empresas propietarias de
los clubes, comenta el académico.
Tropiezos en la cancha
Pero no todos los partidos se
ganan sin tropiezos. El avance de los equipos en dirección de mantener un
negocio redituable ha enfrentado situaciones que parecieran ensombrecer su
panorama. Entre éstas el bajo crecimiento económico y la violencia en los
estadios.
En los últimos cuatro años, el
poder adquisitivo de los mexicanos se ha reducido casi 2% con relación al
salario mínimo real, es decir, se encuentra estancado, establecen cifras de la
Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami).
“Hemos aprendido a ser una
industria del futbol que constantemente vive en crisis y hemos aprendido a ser
competitivos”, asegura Salinas.
Otro nubarrón que se cierne sobre
la cancha del negocio futbolístico es la inseguridad que ha vivido el país en
los últimos años, y que ha tocado a las puertas de varios estados.
El director de mercadotecnia de
la Liga Bancomer MX reconoce que la violencia que han vivido estados como
Michoacán y Coahuila es un hecho importante que ha deteriorado el clima
favorable del espectáculo futbolístico.
Sin embargo, a pesar de los
problemas Salinas asegura que hay segmentos de la población que han
incrementado su asistencia a los estadios, como es el caso de las mujeres, las
cuales en los últimos 3 años se mantenían con tasas de crecimiento del 30%, mientras
que hoy alcanzan el 40%.
Pero la asistencia a los estadios
ya no es una preocupación para los clubes deportivos. Con el paso de los años,
las empresas dueñas de los equipos de futbol han optado por la diversificación
en sus modelos de negocio, lo que ha ocasionado que la venta de boletos sea
sólo una más de sus fuentes de ingresos.
“Como espectáculo tienes que ser
muy competitivo para que el aficionado decida pasar una tarde contigo en el
estadio”, opina Julián Sánchez.
Y para lograr ser más competitivo
como deporte, el académico del IPADE observa una oportunidad en el desarrollo
del talento de jugadores que se encuentran en las canteras de los equipos,
además de representar una fuente adicional de ingresos por la comercialización
de los nuevos talentos en el mercado internacional.
Economía futbolera
Los vaivenes económicos del país
no son ajenos para el deporte nacional. El crecimiento sostenido de la economía
permitiría que las empresas propietarias de los equipos incrementen sus
inversiones, la mismo tiempo que la calidad del espectáculo.
“Yo estoy convencido de que el
futbol mexicano es de buena calidad, pero hay que entender la diferencia de las
economías en donde se desarrollan las distintas ligas y planear las estrategias
que permitan atraer al aficionado”, dice Julián Sánchez.
Por su parte, el directivo del
futbol mexicano ve oportunidades para crecer el valor del deporte más popular
en el país a través de incrementar la presencia de los equipos mexicanos en regiones
como la de Estados Unidos, por la presencia de mexicanos con alto poder
adquisitivo.
Uno de los retos que se encuentra
puerta para el negocio del futbol es que las empresas y una industria en plena
consolidación puedan incrementar su presencia en otras plataformas que no son
sólo la televisión: el desarrollo de las redes sociales y la propia producción
de contenidos por parte del club son los objetivos que se persiguen en el
mediano plazo.
Para Javier Salinas aún el futbol
mexicano tiene mucho por ganar como negocio y como deporte. “Nos hacen falta
muchas cosas, pero debemos lograr que los aficionados reconozcan que estamos en
el ‘top ten’ de las mejores ligas del mundo; quizás no somos los mejores, no
tenemos la mejor liga del mundo, pero tampoco es la peor. Si partimos de
reconocer eso, vamos a poder mejorar”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario