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miércoles, 31 de agosto de 2016

Bancos

 Bancos sin empleados, el futuro del sistema financiero


FORBES- 31 de Agosto de 2016
En el sector financiero trabajan decenas de millones de personas en todo el mundo. Sólo en México hay más de 300,000 empleados entre bancos y financieras, la llegada de las nuevas tecnologías y las mejoras en los procesos de gestión harán que miles de esas plazas desaparezcan.


El negocio financiero es muy sencillo. No hay que producir o fabricar nada, mover o almacenar materia prima o procesada, no se necesitan grandes fábricas y no debería de requerir un excesivo espacio de Retail para distribuir sus productos ya que en su mayoría, no son físicos. Sin embargo, en el sector financiero trabajan decenas de millones de personas en todo el mundo. Solo en México más de 300,000 entre bancos y financieras. Y ese número no tiene en cuenta consultores externos, empresas de mantenimiento, de traslado de efectivo o de seguridad. El número real podría, sin duda, acercarse al medio millón de trabajadores en nuestro país.

 

El sector está saturado de complicaciones, redundancias, procesos manuales y viejos sistemas que le sitúan como claro candidato a una reducción drástica del número de trabajadores en el futuro. Es posible que en unos 20 años, el número de empleados –si se mantienen los mismos servicios- se reduzca a la mitad. En México ese proceso ya comenzó en los grandes bancos con salidas de personal muy relevantes los últimos dos años, pero no ha hecho más que comenzar. Veremos nuevas reestructuras en años venideros, sobre todo si los bancos quieren estar preparados para competir con los nuevos jugadores que ya están apareciendo.

Los procesos de una entidad financiera se pueden resumir en dos grandes grupos: Servicio al cliente y Procesos Internos. A continuación, veremos algunos ejemplos de cómo el sector puede evolucionar en sus procesos con tecnología ya existente:

Servicio al Cliente

El grueso de las plantillas de las entidades financieras se ocupan de dar servicio al cliente –sobre todo a través de las sucursales- en cinco ámbitos:

Recepción de efectivo: con la tecnología existente, el 100% de la recepción de efectivo se podría realizar en Cajeros Automáticos.
Retiro de efectivo: es el proceso más automatizado, pero todavía se permiten retiros en sucursales y corresponsales. La tendencia es a reducirse a cero.
Pagos, transferencias y servicios: transferencias, pagos de servicios y tributos y otros servicios, todavía se permiten en las sucursales, pero en los próximos años, los bancos eliminarán esa opción para trasladar toda esa operativa a la banca online y a la banca móvil, que no requiere intervención humana.
Venta de productos: la tecnología actual permitiría contratar cualquier tipo de producto a través de medios digitales obteniendo precio, documentación, firma digital y confirmación por via electrónica. Imaginen contratar una hipoteca en la que una herramienta calcula, solo con tu número de cuenta, la probabilidad de impago, permite escanear la nómina, validarla con información interna e incluso conectarse al SAT, recibir información de avalistas, calcular el precio, generar el contrato, recibir por medio de tecnología biométrica una firma a través huella dactilar y transferir de inmediato el dinero a la cuenta indicada.
Servicios: la mayor parte de los servicios que da una sucursal podrían automatizarse y ofrecerse a través de sucursales virtuales o banca digital.
Gestión de Reclamaciones y atención al cliente: estos servicios cada vez están más automatizados pero todavía requiere una alta interacción manual en muchas entidades, sobre todo en los procesos de gestión de back office. Los sistemas IVR (Interactive Voice Response) han automatizado casi por completo la interacción con el cliente y en unos años, la gestión de incidencias y peticiones de clientes desaparecerá por completo de las sucursales. De hecho las propias sucursales desaparecerán sustituidas por sucursales virtuales –pantallas interactivas-, cajeros automáticos capaces de dar y recibir efectivo y documentos y por una mayor relevancia de una banca móvil con una funcionalidad que mejora cada día. El siguiente paso es la automatización del proceso de revisión de la problemática de la incidencia y la gestión documental –comprobantes-, que actualmente es todavía muy manual.


Procesos internos

Los procesos internos de una entidad financiera son complejos, pero aun así, en su mayoría, totalmente automatizables.

Sistemas: los sistemas en el sector financiero están sufriendo una profunda transformación. Nuevas tecnologías para generación de información online directamente por los usuarios, mayor capacidad de los procesadores, robotización de procesos, hardware con menores requerimientos de mantenimiento o redes inteligentes son, entre otros, avances que reducirán la plantilla en esta área.
Riesgos: los avances en sistemas de gestión y procesamiento de información así como el Big Data, que permitirá entre otras cosas, generar información de crédito basada en información externa a la entidad –por ejemplo redes sociales-, permitirá reducir la manualidad a mínimos.
Gestión Documental: los procesos de digitalización reducirán a prácticamente cero la gestión documental. La identificación y firma biométrica –huella, análisis de retina u otros métodos de identificación- y los escáneres capaces de escanear documentos oficiales y convertirlos directamente en información, harán desaparecer los tediosos formatos o las firmas de documentos físicos. Todo el proceso podrá ser realizado en oficinas virtuales o mediante dispositivos móviles.
Gestión de Efectivo: los nuevos métodos de pago virtuales –monederos electrónicos, tarjetas o nuevos jugadores como PayPal o Apple Pay- están reduciendo poco a poco la gestión de efectivo así como el uso de cheques o giros postales. Santander ya introdujo un piloto en Reino Unido para gestionar pagos internacionales por medio de tecnología “BlockChain” conectando su app con Apple Pay.
Cobranza: los procesos iniciales de la cobranza temprana así como prevención de impagos ya se pueden realizar completamente con sistemas IVR y mailing automatizado.
Procesos financieros: la mayoría de los procesos contables, de control, validaciones, generación de información financiera e incluso recepción de peticiones y transmisión de información al regulador, podrían automatizarse con la tecnología existente.
Procesos de Recursos Humanos: cada vez más, la formación online se abre paso en las entidades financieras, los procesos de evaluación 360° son llevados a cabo automáticamente y los procesos de gestión de información se automatizarán igual que en otras áreas.
Mantenimiento de instalaciones: una reducción drástica de instalaciones –sucursales, centros corporativos o centros de gestión documenta entre otros- permitirán un ahorro sustancial en el mantenimiento de instalaciones físicas, que a día de hoy son extremadamente intensivas en capital humano.
Seguridad: con la reducción de los procesos de movimiento de efectivo y gestión documental física y con el surgimiento de oficinas virtuales, será necesario hasta un 90% menos de personal de seguridad.
Abel García, Director General de Bluetab Solutions México, opina que “el proceso de transformación digital en la banca es imparable. Nuestros clientes están innovando para combatir la amenaza de las fintech y aligerar sus estructuras de coste. Ya no es suficiente con hacer las cosas mejor que la competencia: hay que entender la tecnología, el negocio y, sobre ello, redefinir lo establecido”.

Este impacto de la tecnología hará que el sector se reinvente y ofrezca nuevos servicios. De esta manera, parte de los empleos destruidos se convertirán, para aquellos trabajadores con formación, en nuevos empleos en áreas relacionadas sobre todo con implantación de nuevas tecnologías y análisis de datos, que requerirán mayor interacción humana dada su creciente complejidad. Sin embargo, para aquellos trabajadores sin formación, el panorama es más complicado ya que sus puestos serán absorbidos por las nuevas tecnologías de manera irreversible.





Carlos Lanzón-Socio de AMROP, firma internacional de Executive Search y consultoría estratégica en talento.

autos eléctricos

Los autos eléctricos se impondrán más pronto de lo que se cree



The  wall street journal -  agosto de 2016  
En 2015, aproximadamente uno de cada 150 autos vendidos en Estados Unidos tenía un conector eléctrico y una batería. No obstante, la adopción masiva de vehículos eléctricos se avecina y llegará mucho más pronto de lo que la mayoría de la gente cree.

Esto se debe en parte a que los autos eléctricos son como los aparatos electrónicos, en los que el cambio tecnológico es rápido.

Uno de estos grandes saltos se da en las baterías. Un vehículo eléctrico típico hoy en día cuesta US$30.000 y recorre, como mucho, unos 160 kilómetros con una carga. En un año, se podrá duplicar esa distancia con un poco de dinero más.

Tesla Motors Inc. es el líder de este cambio, prometiendo un vehículo Model 3 dirigido a las masas, con un precio de US$35.000 sin incentivos en EE.UU. y más de 320 kilómetros de autonomía. En comparación, el auto nuevo promedio en el país norteamericano se vende hoy en día por cerca de US$33.000.

No obstante, Tesla no es la única. Chevrolet lanzará su Bolt EV de US$37.500, que presume de una autonomía de más de 320 kilómetros con una carga, lo cual parece ser la nueva meta para eliminar la “ansiedad de distancia” entre los potenciales compradores de vehículos eléctricos, es decir, el temor de que un vehículo se quede sin carga en medio de la carretera.

Y ese es apenas el comienzo. Pasquale Romano, presidente ejecutivo de ChargePoint Inc., el mayor fabricante de estaciones de carga de autos eléctricos del mundo, dice que está trabajando y en negociaciones con la mayoría de las grandes automotrices del mundo. “Hemos visto sus planes internos para electrificar todo”, dice.

A corto plazo, muchos de estos autos serán híbridos, con motores eléctricos y a gasolina. Tiene sentido contarlos junto a los eléctricos debido a que la mayoría de los modelos nuevos tienen suficiente carga como para llevar al estadounidense promedio a su trabajo y de regreso a casa sin usar gasolina.

Steve Majoros, director de marketing de Chevrolet, unidad de General Motors Co., dice que 90% de los viajes y 65% de los kilómetros conducidos en su híbrido Volt son en el modo eléctrico. El Volt puede recorrer 85 kilómetros con una carga.

Cada híbrido es, para efectos prácticos, un auto eléctrico que lleva un “extensor de autonomía”, por si acaso. Estos ayudarán a electrificar una buena cantidad de los kilómetros que recorren los conductores. También facilitarán la adopción de los vehículos eléctricos por parte de los consumidores, al ayudar a superar cualquier temor respecto a quedarse varados.


La competencia entre los vehículos eléctricos y los híbridos será intensa, lo cual reducirá los precios. Volkswagen AG ha prometido fabricar como híbridos todos sus modelos disponibles para 2025. BMW AG ha dicho lo mismo. Hyundai Motor Co. promete ocho modelos híbridos para 2020, más dos vehículos completamente eléctricos. La renovación del híbrido Prius de Toyota Motor Corp, el cual tendrá el doble de autonomía, llegará antes de fin del año.

Otra tendencia que ayudará esa la proliferación de las estaciones de carga. ChargePoint dijo hace poco que tiene 30.000 estaciones en su red. En comparación, hay cerca de 90.000 estaciones de gasolina accesibles al público en EE.UU., dice Mike Fox, director ejecutivo de Gasoline & Automotive Services Dealers of America.

El número de estaciones de carga comerciales está creciendo rápidamente en parte porque son relativamente baratas, con un costo de entre US$3.000 y US$7.500 por puerto, dependiendo de si es una construcción nueva o una adaptación de una existente. Cuando están ligadas a un negocio, pueden atraer clientes y alentarlos a quedarse por más tiempo y gastar más.

Hy-Vee Inc., una cadena de 241 supermercados en ocho estados de EE.UU., instala estaciones de carga en todos sus locales nuevos. Tiene cuatro cargadores en cada una de 42 locales. Los tiempos de carga para los autos eléctricos varían ampliamente, dependiendo de la estación y el auto, pero usualmente toma entre 30 minutos y 1 hora obtener una carga decente. Convenientemente, es más o menos lo que alguien se demora en comer algo, dice John Brehm, director de planificación de locales de Hy-Vee.

Colocar estaciones de carga en los sitios de trabajo, donde los autos pasan mucho tiempo, sería algo poderoso. Cuando una empresa instala una estación de carga, sus empleados son 20 veces más propensos a comprar un vehículo con conexión eléctrica, según una encuesta del Departamento de Energía de EE.UU.

De todas formas, los conductores no se cambiarán a los vehículos eléctricos tan rápidamente como los consumidores adoptaron los teléfonos inteligentes. El estadounidense promedio mantiene su auto por 11 años. Sin embargo, cuando la mayoría de la gente esté lista para comprar otro auto habrá una gama de vehículos eléctricos disponibles a precios comparables a los de gasolina. Y eso no tiene en cuenta los ahorros proyectados en combustible o mantenimiento, ya que los vehículos eléctricos tienen muchas menos partes móviles.

Esa es la naturaleza de los giros tecnológicos que causan “disrupción”, en los que parece que nada está cambiando hasta que parece que todo está cambiando a la vez. Los vehículos eléctricos han pedido pista desde hace rato, pero ahora representan una amenaza tan clara y cercana al motor de gasolina que Fox, de la asociación de estaciones de servicio, recomienda ahora que los miembros que firman contratos a largo plazo por estaciones de combustible incluyan una opción de renegociar si más de 10% de la flota de un estado se convierte a vehículos eléctricos.


Si Tesla cumple sus promesas actuales con el Model 3, dice Fox, “los vehículos a gasolina serán historia”.

martes, 30 de agosto de 2016

secretos

 Los secretos en la mente de un neurocirujano


FORBES- 30 de Agosto de 2016
En el ejercicio diario de la medicina y, en este caso, en la labor de un neurocirujano, descansan la esperanza de sobrevivir, de vivir lisiado o de una muerte inminente.



“La esperanza es el único bien común a todos los hombres; los que lo han perdido todo, la poseen aún”

Tales de Mileto



Advertí la semana pasada que en esta entrada habría de hablar sobre el segundo libro que leí en mis días de descanso. El libro del que platicaré el día de hoy se llama “Ante todo no hagas daño” escrito por Henry Marsh, médico inglés cuya especialidad es la neurocirugía.

Este libro, elegido como el “mejor libro del año” en 2016 por el Financial Times y The Economist ha cautivado y conmovido a todo tipo de lectores. Marsh nos presenta un relato honesto y valiente que coloca a los pacientes frente a sus médicos, que nos genera compasión y entendimiento del quehacer médico diario.

 

Todas las profesiones son loables y fundamentales; de las decisiones de políticos, académicos, científicos, abogados, ministros, procuradores de justicia, así como de operadores de transportes dependen un buen número de vidas humanas, pero del ejercicio diario de la medicina y, en este caso, de la labor de un neurocirujano, dependen la esperanza de sobrevivir, de vivir lisiado o de una muerte inminente.

Quiero destacar, en un ejercicio similar al de la semana pasada, algunas frases que creo vale la pena compartir:

 “Allí reflexioné, una vez más, sobre cómo muchas de las cosas que nos ocurren en la vida las determina el más puro azar”.

 “La investigación en el campo de la psicología ha demostrado que la ruta más fiable hacia la felicidad personal es hacer felices a otros”.

 “Al fin y al cabo, una cuarta de la sangre que bombea el corazón va a parar al cerebro. Está visto que pensar es un proceso que exige muchísima energía”.

“Cuesta mucho aceptar que uno no puede hacer nada; pero la muerte no es siempre un mal resultado, y una muerte rápida puede ser mejor que una lenta”.

 “Ahora, treinta años después, cuando recuerdo lo importante que me sentía en aquella época, no puedo evitar reírme de mí mismo”.

“Ahora que me acerco al final de mi carrera, esa distancia ha empezado a desdibujarse. Tengo menos miedo al fracaso: he llegado a aceptarlo y a sentirme menos amenazado por él, y confío en haber aprendido algo de los errores cometidos en el pasado, de modo que puedo arriesgarme a ser un poco menos objetivo”.

“Cuando uno llega a mi edad, se da cuenta de que todas las dificultades tienen que ver con la toma de decisiones”.

“Envidio la manera en que la generación que me formó podía aliviar el intenso estrés de su trabajo perdiendo los estribos, a veces de forma escandalosa, sin temor a que los llevaran a juicio por intimidación y acoso”.

“Aquél fue un trabajo deprimente y con pocas compensaciones, en el que aprendí mucho sobre las limitaciones de la generosidad humana, especialmente de la mía”.

 “Ahora estoy más dispuesto a aceptar que dejar morir a alguien puede ser una opción mejor que operarlo cuando sólo hay una posibilidad muy pequeña de esa persona pueda volver a valerse por sí misma. No es que sea más capaz de predecir el futuro, pero sí me provoca menos angustia cómo puedan juzgarme los demás”.

“Y mientras recorría el pasillo del hospital en penumbra volví a maravillarme por la forma en que nos aferramos a la vida y me dije que habría mucho menos sufrimiento si no lo hiciéramos. La vida sin esperanza es tremendamente difícil, pero con cuánta facilidad consigue la esperanza, en definitiva, volvernos necios a todos”.

 “Con los años he aprendido que, cuando se trata de dar malas noticias, lo mejor probablemente es decir lo menos posible. Esas conversaciones son por naturaleza lentas y dolorosas, y uno debe contener el impulso de hablar por los codos para llenar el triste silencio”.

“Enterarme de que los errores de juicio y la propensión a cometerlos se encuentran, por así decir, incorporados al cerebro humano, supuso todo un consuelo para mí al pensar en algunas de las equivocaciones que he cometido en mi carrera”.

Las experiencias de la carrera profesional del Doctor Marsh y su franqueza y honestidad al compartirlas, suponen una aproximación al dolor humano, al sufrimiento, al entendimiento de lo que somos y a la esperanza que, sin duda, nos sobrevivirá a todos.




Maribel Quiroga Fernández-Internacionalista de profesión. Mexicana de nacimiento. Cervecera de corazón. Me apasiona el quehacer político. Creo en la contradicción. Me entiendo en los libros y en las palabras. Directora general de Cerveceros de México.

empleo y en tu empresa

 Sí, es posible cobrar lo que tú quieras en tu empleo y en tu empresa


FORBES- 30 de Agosto de 2016
No importa que el producto seas tú mismo, no importa incluso si eres o no emprendedor, pues hasta siendo empleado entre más útil seas mayor oportunidad tendrás para exigir más. Y esta ley te llevará a crecer. La clave es simple: entre mayor utilidad práctica brindemos a los demás, mayor utilidad económica obtendremos.

Hacernos verdaderamente útiles, nos atraerá clientes con lealtad a nuestra marca, y nos dará la oportunidad de percibir mayores ganancias. Y en este artículo te diré por qué.

Una de mis leyes de negocios es: Servir más para ganar más. Cuestión que estamos viendo actualmente como motor y clave para los negocios de la nueva era.

No hay nada más lucrativo que servir. Porque el principio, ahora es el fin último. Y todos los que quieran sobrevivir en el mercado tienen que comenzar por volverse increíblemente útiles con sus productos y sus servicios.

No importa que el producto seas tú mismo, no importa incluso si eres o no emprendedor, pues hasta siendo empleado entre más útil seas mayor oportunidad tendrás para exigir más. Y esta ley te llevará a crecer.

Lee también: 4 claves para internacionalizar tu empresa exitosamente

La clave es simple: entre mayor utilidad práctica brindemos a los demás, mayor utilidad económica obtendremos.

Y te tengo que decir algo básico:

Tienes que servir mucho y servir bien. Servir ANTES, durante y DESPUÉS de que tu cliente saque el dinero de su bolsillo es la clave. Porque de otra manera no tardarás en quedarte atrás de tu competencia.

Sí, ahora las pymes, los profesionistas independientes y muchos nuevos modelos de negocio en línea y fuera de ella, lo están haciendo.

Cada día son más los negocios que ofrecen a manos llenas oportunidades, información, crecimiento, herramientas, formas de apoyo y otras estructuras informativas, incluso sin cobrar por ellas.

Las nuevas apps, y los recursos que ofrecen están superando los momentos de compra y esto está revolucionando el mercado de una manera sorpresiva y sorprendente.

La ganancia está suscitando seguidores de marcas, de personas, de pymes, etc. Porque muchos clientes allá afuera no están acostumbrados aún a que esto suceda, y se sienten verdaderamente atendidos, respaldados y apoyados, cuestión que piden a gritos a las grandes empresas, pero que les ha hecho voltear a ver a las pequeñas.

Muchas empresas pequeñas y hasta profesionistas independientes están solucionando con mejores resultados y un servicio más cercano, cosas que no están haciendo las grandes multinacionales.

Las estrategias informativas, las estructuras de promoción y muchas nuevas tendencias de mercado están explotando el principio de la reciprocidad, dándose cuenta de que este funciona y está haciendo sonar las cajas registradoras de muchas pequeñas empresas de servicios y productos.

Estos nuevos modelos de ganar-ganar se está convirtiendo en poder para quienes apuestan por este tipo de estructuras y estrategias. Porque al final sólo de servir y ser útiles se trata. Y muchos negocios están viendo resultado de ello, sobre todo en el área de servicios. La realidad es que las recompensas les están llegando por añadidura. Y esto sólo está suscitando una y otra compra. Porque incluso antes de comparte ya te están consumiendo. Y esa utilidad de tu producto o servicio se está notando.

¿Cómo hacer que estas estructuras te ayuden a ti también?

Primero debes comprender que lo más importante es llegarle a miles y miles de personas porque, como lo he dicho en otros artículos, las ventas son una fórmula matemática: entre mayor sea el número de personas a la que llegas de manera efectiva y con una comunicación eficaz y persuasiva, mayor será la posibilidad de que el número de clientes potenciales se traslade a tu lista de clientes cautivos.

Es una estructura de reloj de arena donde la base del reloj se debe aumentar, para que a su vez el reloj de arena tenga un mayor cuello al centro del mismo, y por lo tanto pasen más clientes cayendo a la pirámide de la facturación.

¿Cómo convertirte en una revolución en el mercado?

He notado que quienes brindan cada vez mayor beneficio, obtienen cada vez mayores respuestas. Tienes que volverte más arriesgado en la forma en la que apuestas por el principio de reciprocidad, pero hazlo desde una perspectiva de verdadera ayuda, porque esta sí funciona,

¿Cómo están atacando algunos negocios?

He estado ayudando a atacar con estas estructuras de comunicación estratégica a profesionistas independientes y los resultados han sido muy buenos. La base es primero ofrecer de manera desinteresada y absolutamente gratis un producto o servicio. Como sistema de atracción de clientes, generando con ellos la oportunidad de beneficiarse de múltiples formas con los propios productos y servicios en línea.

¿Qué esquemas estoy trabajando con algunas personas que ayudo, a revolucionar el mercado?

Con pequeños negocios estamos siendo arriesgados, con la única finalidad de ganar-ganar llegando al punto incluso de permitir que los propios clientes escojan el precio que pagarán por algunos productos o servicios. Con un esquema denominado “Pick your Price”

¿Qué está sucediendo con ello?

Empoderamiento a las personas, transfiriéndole el poder de decisión sobre el precio. Sé, de primera mano cómo esto está siendo revolucionario.

La idea detrás tiene una raíz mágica, beneficia lo suficiente, permíteles tener poder a quienes te compran, y que sea ellos los que decidan, porque al final del día “eres tan bueno” que eso se refleja en la forma de dar en abundancia.

Tú podrás pensar ¿Pero cómo es posible que les permitan escoger entre tres precios obteniendo el mismo producto?

Pues sucede que así es, ellos deciden, la empresa o el negocio sólo marca de alguna manera el precio recomendado, pero además les permiten a las personas pagar menos por ese mismo producto o servicio. Y las ventas se van incrementando.

Cuando la estrategia es buena, y lo que le brindan de manera gratuita funciona y funciona muy bien, suceden varias cosas la primera es que adquieren algo, con un precio menor (no importa, ya se volvieron clientes) y se suscitan cosas maravillosas:

1.-Agradecimiento

2.-Recomendación

3.-Nuevas compras

Porque en el nivel de percepción, al obtener un mayor beneficio y haber pagado menos de lo que esa persona cree que valía, hace que el principio de reciprocidad tienda a crecer. Lo que genera sin duda lealtad a la marca, por el mismo principio de reciprocidad.

Se ven mediante análisis cómo personas que antes elegían un producto o servicio vuelven a comprar y después de hacerlo un par de veces con el precio menor, eligen de manera libre y sin que nadie intervenga el precio medio. Todo por el simple principio de reciprocidad.

Te sorprenderías de ver como este tipo de modelos arriesgados y otros similares están revolucionando en otros países la idea de servir mucho más para ganar mucho más.

Por otra parte otro de los beneficios de un modelo como este es captar una cantidad de clientes que originalmente se salían del rango de posibilidad de adquirir el producto o servicio por su precio. (No podían costearlo o al no saber lo que recibirían, no lo pagaban y esto está comenzando a cambiar con este tipo de estructuras)

Un modelo como este cuya principal estructura se ve actualmente en línea está revolucionando la forma en la que se da servicio. Se brindan beneficios y se gana,  llegando a un mayor número de personas y logrando convertir a un mayor número de observadores en clientes potenciales y en clientes cautivos.

Así pues se están marcando las nuevas tendencias sobre todo en negocios en línea, con estas estructuras, pero quiero que pienses:

1.- ¿Y tú cómo podrías beneficiarte de dar más?

2.- ¿Cómo esto podría funcionar para mí?

3.- ¿Cómo mi empresa, producto o servicio se podría beneficiar ofreciendo más?

Porque servir, dar más y mejor, está llevando a otros al éxito. ¿Tú que vas a hacer?




Alejandro Meza-Coach fundador de Impulso Humano México. Desarrollador de metodologías poco convencionales en Coaching y Capacitación para organizaciones y empresarios.

creatividad

8 claves de las personas exitosas para que fluya la creatividad


FORBES- 30 de Agosto de 2016
En esta era en la que tanta información confunde, las buenas ideas se convierten en un bien necesario y valioso. Son ese rayo de sol que es tan codiciado en una caverna oscura. Tanto clientes como emprendedores batallan en ambientes atiborrados de datos y es complicado encontrar inspiración.
Para triunfar en los negocios, para ser una persona exitosa se necesita innovar. La innovación es el grado más alto de excelencia y todos aspiramos a llegar ahí. Las ruedas de la continuidad y el progreso se aceitan con cambios que introducen novedades y para ello se necesita de un proceso de pensamiento creativo. Necesitamos ser originales —o ser percibidos así— para ganarnos la preferencia del mercado. Lo que no es tan popular es cómo ser únicos y como atrapar la atención de un cliente que cada vez está más distraído y abrumado por tantas opciones.

Lee también: Fuentes de inspiración italiana que llegan a tierras mexicanas

En esta era en la que tanta información confunde, las buenas ideas se convierten en un bien necesario y valioso. Son ese rayo de sol que es tan codiciado en una caverna oscura. Tanto clientes como emprendedores batallan en ambientes atiborrados de datos y es complicado encontrar inspiración. La demanda constante de novedades se convierte en una exigencia cada vez más agresiva y la inspiración, ante la amenaza, se esconde entre los rincones del cerebro y se niega a salir. Como sucede generalmente, mientras más tratamos de forzarla, más huidiza se vuelve. Si traemos el foco de la imaginación algo apagado o de plano sentimos que se fundió, hay que cambiar la estrategia.

Tampoco es tan difícil. Algunos consejos de creatividad que ocupan escritores y artistas plásticos pueden ser de utilidad a empresarios y emprendedores.



No entrar en pánico. Primero lo primero, hay que guardar la calma. Cuando estamos asustados, tenemos todos los sentidos puestos en las señales de alarma y la inspiración se ve relegada. Los estados de máxima angustia no son propicios para generar nuevas ideas. El lobo feroz en el cuento de las novedades es el estrés, así que a respirar para encontrar el centro.


Hay que cambiar de escenario. El lugar común germina con mucha facilidad en nuestro lugar de confort. Para espabilarnos hay que salir, romper la rutina, tomar rutas diferentes. Caminar, andar en bicicleta, sentarse en otro espacio nos ayuda a ganar perspectiva y a tomar un punto de vista diferente. Incluso, ir por un camino distinto, estacionarse más lejos o más cerca puede dar con la clave. Tomar un café a una hora en la que no solemos hacerlo, en un local nuevo abre posibilidades. Es más, sacrificar la comodidad, a veces, ayuda. Cambiar es la clave.


La observación siempre ha sido fuente de inspiración de artistas y científicos. Poner la cabeza y el pensamiento en el entorno, en vez de estar pensando en la inmortalidad del cangrejo puede lograr que el foco creativo se encienda. Tina Seeling, en su taller de creatividad, hace que sus alumnos tomen conciencia del ambiente que los rodea. Les pide que escriban, a detalle, el salón de clases. ¿Está abierta la puerta? ¿Qué se ve desde la ventana? ¿Qué tan elevados están los techos? ¿Cuántos objetos verdes hay? ¿A qué huele? Va desde lo sensorial hasta lo abstracto. Sostiene que, al poner atención en lo aparentemente pequeño, se abre la puerta a la detección del problema y en consecuencia a la solución.


Mark Zuckerberg sostiene que las mejores soluciones le han llegado al estar caminando en los pasillos de la empresa. Algunas veces lo hace acompañado y otras, solo. La lógica es que, al salir de la oficina, al recorrer los andadores, los espacios de fotocopiado, el lugar donde la gente se sirve café, va con las antenas en alto. Verifica el estado de ánimo de su equipo, oye el tono de las conversaciones y eventualmente, capta alguna de las soluciones que estaba buscando. Sale a caminar como un cazador de mariposas y atrapa las soluciones al vuelo como quien las mete suavemente a una red. No busca soluciones en la grandilocuencia sino que las encuentra entre lo cotidiano.


Ponerse en contacto con el agua. Paulette Kauffman, autora de Bathing rituals to revitalize spirits, dice que los estudios de flotación confirman que la inspiración es amiga del agua. Lagos, mares, ríos han hecho magia en la vida artística de muchos virtuosos. Arquímedes gritó ¡Eureka! Mientras estaba en la bañera. Agatha Christie confesó haberse inspirado en la tina de baño para escribir sus misterios. El agua tiene el poder de diluir el estrés, de limpiar la mente, desbloquear la imaginación y hacer brotar la imaginación. ¿Cuántas ideas habrán germinado en una silla de playa oyendo el rumor de las olas? Pero, si no hay tiempo para ir al mar, un buen regaderazo puede servir.


Ordena el lugar en el que estás trabajando. El caos físico invade la mente y contagia al pensamiento. En sentido contrario, el orden y la limpieza destraban el pensamiento creativo. Las bibliotecas llenas de papeles y gatos por doquier funcionan a pocas personas. Los lugares en los que se incuban las ideas que huelen bien y en los que cada cosa tiene un lugar ayudan a acelerar el pensamiento creativo. Permiten concentrarse en lo importante y no se distraen. Un escritorio en el que nada más se encuentra lo que se necesita, evita entretenimientos innecesarios que quitan tiempo e inspiración.
El silencio es una incubadora natural de inspiración. Me refiero a un mutismo en el que no hay interrupciones y en el que el pensamiento encuentre esa libertad que tanto le negamos con mensajes electrónicos, llamadas telefónicas, juegos, recados urgentes.


Propiciar ambientes agradables en el que los sentidos puedan desarrollarse. Desplegar la mirada, estar en contacto con texturas, aromas seductores, sabores atractivos y el sonido que nos introduce a un modo creador son importantes. Aquí es necesario entender y escucharnos. Descubrir cuál es nuestra sensación regente y estimularla.

Dice Tina Seeling que la creatividad no es cara, es gratuita. Estoy de acuerdo, sin embargo, creo que la extraviamos frecuentemente y en vez de ponernos a buscarla, lloramos. Encontrarla no es tan difícil, pero hemos olvidado cómo hacerlo. Para espolear la creatividad, tenemos que dejar de hacer las cosas como siempre y hacerlas en forma distinta, tal como lo decía Einstein.


Pareciera que construir una ventaja competitiva, una imagen que nos distinga, resulta algo muy complicado. No lo es. La forma de activar la creatividad y llegar al grado de innovación se hace escuchando a nuestro cliente potencial y entendiéndolo. Eso se logra con mayor efectividad si dejamos la comodidad y nos aventuramos a ver las cosas en forma distinta.  Claro, no hay fórmulas mágicas. Pero podemos adoptar algunas prácticas de gente a las que sí le han resultado.




Cecilia Durán Mena-  le gusta contar. Poner en secuencia números y narrar historias. Es consultora, conferencista, capacitadora y catedrática en temas de Alta Dirección. También es escritora.

lujo online

  El primer estudio sobre el consumo de lujo online en México


FORBES- 30 de Agosto de 2016

Forbes Life, Territorio Creativo e ISDI presentan el primer estudio sobre el consumo de lujo online en México. Un análisis de las expectativas y hábitos de los consumidores de alta gama en el país que constata una realidad: todo está cambiando a un ritmo vertiginoso.



Ya no hay vuelta atrás. Éste es el viaje al consumidor digital.

Algo está cambiando en el mercado del lujo. Y a ritmo vertiginoso. En 2010 la gurú Cathy Horyn, una de las plumas más respetadas dentro de la industria, escribía en The New York Times un artículo titulado con retraso, el lujo abraza internet que comenzaba así: “Las casas de la moda, a pesar de su autoridad creativa en la pasarela, se han mostrado sorprendentemente lentas en aportar el mismo nivel de autoridad y visión artística a sus webs. El problema no está en vender mercancías de lujo por internet. Por el contrario, parece radicar en que los diseñadores y los jefes de la moda, aquellos que supuestamente deben predecir el futuro, no parecen comprender el aspecto más obvio del presente: la red”.

Seis años más tarde, el panorama ha cambiado de manera radical y hoy parecen más obsesionadas por el número de likes que registran las cuentas de Instagram de modelos como Kendall Jenner y Gigi Hadid que por la continuidad de sus directores creativos al frente de maisons históricas (el término medio no supera los tres años). ¿Qué está pasando en el mercado del lujo? Básicamente, que internet lo ha cambiado todo: el perfil de su consumidor, la forma de vender y también la manera de comunicar su producto. Porque el lujo ha dejado de ser un intangible para convertirse en un producto y los grandes grupos —LVMH, Kering y Richemont— no quieren perder su parte del pastel.


México, el undécimo país más poblado del mundo, con 121.7 millones de habitantes y una población joven (menor de 24 años) de 45.5%, es uno de los grandes objetivos para estos grupos, especialmente tras la crisis de Brasil. Es el noveno país del mundo con mayor número de millonarios: 122,000 en 2015, aunque el Global Wealth Report 2015 de Credit Suisse advierte que esta cifra crecerá un 68% hasta 2020. La industria del lujo contempla a México como el nuevo El Dorado de América Latina, especialmente en términos digitales, ya que somos un país único en el mundo: el 91% de los internautas está conectado a alguna red social, una cifra que sitúa a México como un mercado muy apetecible, pero también muy competitivo para el lujo online.

Territorio Creativo, consultora de transformación digital, en colaboración con Forbes Life y el Instituto Superior para el Desarrollo de Internet (ISDI), han elaborado el primer estudio que analiza todos estos factores: Viaje del consumidor digital en la industria del lujo en México. Se trata de un estudio de las expectativas y hábitos de los consumidores de alta gama en nuestro país, elaborado a partir de una encuesta en la web de Forbes. Lo primero que llama la atención es que, a pesar de que México es uno de los países con mayor tradición retail de toda América Latina —El Palacio de Hierro se fundó en 1891—, se ha incorporado a la tendencia de la compra online en menor medida que otros países, pero con unas expectativas de crecimiento exponenciales, según Salvador Suárez, Partner

Director en Territorio Creativo. Mayoritariamente, según el estudio, la compra sigue siendo offline, sobre todo en tres ámbitos: los centros comerciales —“los grandes democratizadores del lujo”, según Suárez—, las boutiques de las marcas y tiendas multimarca. Pero el panorama está evolucionando, especialmente en las franjas de edades comprendidas entre los 25 y 54 años. De los 25 a los 34 años es la franja con mayor uso de aplicaciones y e-commerce; de los 45 a los 54 compran sobre todo a través de portales internacionales, y entre los 35 y los 44 años, lo hacen en los dos ámbitos. Por género, el hombre busca más asesoramiento que la mujer y, a mayor nivel de ingresos, mayor es también su uso de nuevas tecnologías.


Por sus hábitos de compra online, el informe divide a los consumidores en tres perfiles: los convencidos (73.1%), que compran en la red, incluido lujo; los reservados (15.4%), que aunque compran en internet no asocian el lujo a este canal, y los distantes (11.5%), que no compran en línea. Lógicamente, el grupo con ingresos superior a 1,700,000 MXN es el que lidera el gasto en todas las categorías: joyería (82%), deportes (74%), tratamientos de belleza (69%), viajes y ocio (66%) y decoración (41%). Sin embargo, en términos generales, atendiendo a todos los perfiles de ingresos y edad, el gasto se destina principalmente a tres grandes áreas: lujo experiencial, es decir, viajes y ocio, en primer lugar; decoración y tecnología. Hay una característica común a los consumidores de lujo en México: todos consumen información en internet, por lo que las marcas se han visto obligadas a aumentar sus contenidos digitales.

Si hace seis años Cathy Horyn escribía: “Entramos en las páginas de las marcas más innovadoras —Prada y Balenciaga, por nombrar dos— y apenas encontramos la más mínima apreciación del potencial que la tecnología digital ofrece. No hay películas que iluminen el método creativo, ni animación, ni gestos de diseño coherentes con el espíritu contemporáneo de estas marcas”. Hoy la experiencia es completamente diferente. Las marcas crean fashion films para sus páginas y generan contenidos no sólo a nivel institucional, sino a través de sus redes sociales, de manera interactiva. El estudio corrobora que un hábito cada vez más extendido entre el consumidor de lujo es una práctica denominada ROPO (Reseach Online Purchase Offline), que consiste en la búsqueda en línea sobre productos y servicios (63%) y su compra posterior por los canales tradicionales (51%).

La principal razón por la que la mayoría de los clientes consumen lujo a través de internet es la co- modidad (59%) de hacerlo desde casa y con todas las garantías, frente a lo que muchos pensarían: el precio (41%). Los dispositivos más empleados para hacerlo son la computadora (70.2%), smartphones (50%) y en tercer lugar la tablet (su tanto por ciento varía en función de la franja de edad). Y los medios de pago más habituales: la tarjeta de crédito (64%) y Paypal (19.4%), que se impone a otros métodos más tradicionales, como la transferencia bancaria (6.2%) o el pago en Oxxo o sucursales (6.2%). Los dos factores que más se valoran en la compra online son el seguimiento del pedido (69.9%) y la ausencia de problemas (68.8%).


Los medios de comunicación, impresos o digitales, siguen siendo la principal influencia a la hora de generar un estímulo de compra, pero las redes sociales y las recomendaciones de los influencers cobran cada vez mayor importancia. Un ejemplo: 62% de los consumidores de lujo son seguidores de alguna personalidad en internet. Lo más importante para las marcas es que la relación entre ellas y los consumidores se establezca a través de sus redes sociales, así como la atención al cliente. Este es el gran reto al que se enfrentan hoy: la fidelización. Un estudio de la Universidad de Nueva York del año pasado revelaba que hace diez años 80% de los consumidores podía nombrar sin dudarlo su marca de lujo favorita. Hoy sólo 61% de los preguntados es capaz de responder con tanta certeza.

Ante este panorama, señala Suárez, las marcas pueden encontrar un aliado de gran valor en internet si trasladan sus estrategias de fidelización, casi todas offline, al ámbito virtual y logran la transición “de con- sumidor a presumidor”. Los tres pilares para lograrlo son a través de los datos, con información de los consumidores obtenidos a través de las redes sociales para establecer estrategias personalizadas que permitan adelantarse a sus decisiones de compra; la tecnología, que ayuda a ser mucho más eficaces, y la creatividad, que se traslada a unos contenidos en las webs con valor. La publicidad también ha de adaptarse a este nuevo entorno, conectando a la marca con el consumidor.

El gran reto al que se enfrentan las marcas de lujo, a juicio de Suárez, es generar una identidad digital con mayor presencia en redes sociales —aquí se plantea un dilema: hay que elegir qué red social es la indicada, ya que tienen diferentes perfiles; por ejemplo: Burberry y Snapchat—, crear contenidos con un plan editorial que traslade su imagen de marca y la interacción con el consumidor, a través de su Community Manager.

Internet ha permitido que en los últimos años las marcas sean un medio de comunicación en sí mismas, a través de su web y otras vías, como un blog corporativo, Facebook, contenidos editoriales y pauta (publicidad tradicional en medios impresos y digitales). En el caso de los medios digitales, la obtención de datos median- te las redes sociales de sus potenciales consumidores les permitirán una mayor segmentación social (por intereses, distancia física y nivel socioeconómico) y cierta familiaridad. Y esa visión de digitalizar el mundo se traslada, según Suárez, a todos los ámbitos, inclui- das las tiendas. Un concepto al que una marca pionera como Burberry se adelantó ya en 2012 en su flagship store de Londres, donde los espejos de los probadores se sustituyeron por pantallas.

“TODOS SOMOS CLIENTES”

Carlos Salcido, CMO de El Palacio de Hierro, considera que en la actualidad “hacer una distinción entre consumidor on y offline es absurdo: todos somos clientes”. Para él, la gran ventaja del entorno digital es que “permite conocer mejor al cliente y perfilar sus gustos”. Hoy, los clientes digitales llegan por diversos canales: la web, pero también las redes sociales y las apps. “Lo que hay que hacer es inspirarlo y pensar cómo llegar a él”, asegura. El gran secreto es tener un compromiso con el consumidor y trasladarlo a todas las plataformas, incluida la tienda. “El gran reto es entrenar al equipo: si el consumidor sabe más del producto que el equipo, eso es fatal”, añade. Para él, la gran ventaja del retail tradicional sobre el e-commerce sigue siendo un componente personal, que en El Palacio de Hierro funciona a la perfección: “La personalización, conocer al cliente con nombre y apellidos, esa es una de las claves del éxito”. Por el momento, considera que “no hay que ser radical: hay que estar en los dos mundos”.

“TODO ES DIGITAL”


Enrique Maldonado, Country Business Manager de Nespresso, advierte que el mercado del lujo está en un momento decisivo en el que no puede hacer una distinción entre ambos ámbitos: “No existe un canal digital, porque todo es digital. Hoy por hoy tenemos una oportunidad única de dirigir una comunicación a alguien que esté buscando una experiencia perfecta, tanto online como offline”, asegura. Para Maldonado, hay que prepararse en tres niveles para ofrecer la experiencia perfecta: “En primer lugar, a través de una alta calidad; segundo, a través de la innovación constante y, tercero, mediante la personalización”. Para él, lo más importante es que “todo debe ser 360 grados y, para ello, no hay que olvidar la parte del equipo: eso es lo más importante, por eso hay que potenciar su formación y su motivación. El elemento humano sigue siendo fundamental para generar lealtad”, concluye. ¿El secreto? Acompañar al consumidor en su experiencia de compra desde el principio hasta el final.

El lado siniestro

El lado siniestro del efectivo



The  wall street journal- martes, 30 de agosto de 2016
Los billetes de alta denominación alimentan la corrupción y la delincuencia


Cuando le digo a la gente que he estado estudiando por qué el gobierno debería reducir drásticamente la circulación de papel moneda, la reacción inicial más habitual es el desconcierto. ¿Para qué ocuparse de esas nimiedades? Pero lo cierto es que el dinero en efectivo está en el centro de algunos de los problemas monetarios y de finanzas públicas más complejos de la actualidad. La eliminación de la mayor parte del efectivo circulante —es decir, el avanzar hacia una sociedad donde el dinero se use con menos frecuencia y principalmente pequeñas transacciones— podría ser una gran ayuda.

Las fuerzas del orden tienen muy pocas dudas de que el papel moneda (especialmente billetes de alta denominación como el de cien dólares), facilita la delincuencia en la forma de chantaje, extorsión, lavado de dinero, tráfico de drogas y de personas y corrupción de los funcionarios públicos, por no hablar de terrorismo. Hay sustitutos del efectivo, como las criptomonedas, los diamantes en bruto, las monedas de oro, las tarjetas de prepago, pero para muchos tipos de transacciones criminales, el dinero en efectivo sigue siendo el rey. Ofrece un anonimato absoluto, portabilidad, liquidez y es casi universalmente aceptado. No es casualidad que cada vez que hay un gran operativo policial antidrogas, las autoridades suelen encontrar grandes fajos de billetes.


El efectivo también está profundamente implicado en la evasión de impuestos, que le cuesta al gobierno federal de EE.UU. unos US$500.000 millones al año en ingresos. De acuerdo con el Servicio de Impuestos Internos, gran parte de la evasión se concentra en pequeñas empresas, que usan el efectivo intensivamente, lo cual dificulta la verificación de sus ventas y declaraciones de ingresos. Por el contrario, las empresas que hacen la mayoría de sus pagos con cheques, tarjetas de crédito o transferencias electrónicas saben que es mucho más fácil que las autoridades fiscales detecten cualquier irregularidad. Aunque hay menos datos sobre los gobiernos estatales y locales, es probable que estos pierdan hasta US$200.000 millones al año por este concepto en EE.UU.

Obviamente, reducir la cantidad de efectivo no va a cambiar la naturaleza humana y hay otras maneras de evadir impuestos y gestionar empresas ilegales. Pero es indudable que inundar la economía informal con papel moneda alienta el comportamiento ilícito.

El efectivo también se encuentra en el núcleo del problema de la inmigración ilegal. Si los empleadores estadounidenses no pudieran pagarle tan fácilmente en efectivo a los trabajadores indocumentados al margen de los libros, el atractivo del empleo disminuiría y el flujo de inmigrantes ilegales se reduciría drásticamente. Es obvio que la eliminación de la mayor parte del efectivo sería una forma mucho más humana y sensata de desanimar la inmigración ilegal que construir un muro gigantesco.

Para que quede claro, estoy proponiendo una sociedad con “menos efectivo”, no una sin efectivo, al menos en el futuro previsible. La primera etapa de la transición implicaría la eliminación gradual de los billetes de alta denominación que constituyen el grueso del circulante. De los más de US$4.200 en efectivo por cada persona que circulan fuera de las instituciones financieras en EE.UU., casi 80% está conformado por billetes de US$100. Los billetes de US$50 y US$20 también deberían ser eliminados gradualmente, aunque los de US$10, US$5 y US$1, que apenas constituyen el 3% del dinero circulante, deberían ser mantenidos indefinidamente.

El objetivo de deshacerse de los grandes billetes es dificultar el transporte y almacenamiento de grandes montos de dinero. Un millón de dólares en billetes de US$100 pesa poco menos de 10 kilos y puede caber cómodamente en una bolsa de compras. Hacer lo mismo con billetes de US$10, no es tan fácil: piense en cargar un baúl de 100 kilos. Los acaparadores y los evasores de impuestos encontrarían proporcionalmente más costoso contar y almacenar billetes de baja denominación. El uso de dinero en efectivo podría ser desalentado aún más poniendo restricciones al tamaño máximo de los pagos en efectivo permitidos en las ventas al por menor.

El hecho de que los grandes billetes se utilicen mucho más en las actividades ilegales que en las legales ha penetrado desde hace mucho en la televisión, el cine y la cultura popular. Los espectadores de “Breaking Bad”, la serie de TV sobre un profesor de química de secundaria transformado en traficante de metanfetaminas, mostró una idea bastante clara de cómo el dinero se gana, se gasta y se lava en las actividades delictivas.

Los diseñadores de políticas han sido mucho más lentos en reconocer esta realidad. Destacan la popularidad del dólar en el exterior, especialmente en algunos países con gobiernos problemáticos como Rusia, donde no es inusual pagar por un apartamento con un maletín lleno de billetes de US$100. En un momento, la Fed y el Departamento del Tesoro insistían en que la demanda externa explicaba hasta 70% de la demanda de dólares estadounidenses, pero este argumento ha sido contrariado por la evidencia que sugiere que al menos una gran proporción de dólares debe ser mantenida en la economía informal de EE.UU. (como he mostrado en un trabajo de investigación hace casi dos décadas). La propia Fed estima ahora que menos de la mitad de todos los dólares en efectivo circula fuera de EE.UU.

Si el dinero en efectivo es tan nocivo, ¿por qué quedarse con los billetes de US$10 y menos? Por un lado, el efectivo sigue representando más de la mitad de las compras minoristas inferiores a US$10. Este porcentaje cae abruptamente a medida que crecen los montos de las transacciones y el uso de tarjetas de débito, de crédito, transferencias electrónicas y cheques. Estos medios de pago exceden al efectivo para los compromisos superiores a los US$100, que son además legales y pagan impuestos.

Muchas personas de escasos ingresos todavía dependen en gran medida del efectivo, aunque por supuesto no son los que cargan fajos de US$100. No costaría mucho que el gobierno o las instituciones financieras les proporcionaran tarjetas de débito. Esto también haría más sencillo, más seguro y menos costoso para el gobierno hacer transferencias a los más necesitados. Varios países escandinavos ya han dado este paso.

Retener los billetes de baja denominación alivia una serie de problemas que podrían surgir si el efectivo fuera eliminado por completo. Por ejemplo, el efectivo sigue siendo útil cuando un huracán u otro desastre natural deja fuera de servicio la red eléctrica. La mayoría de los manuales de preparación de desastres piden a la gente que conserve un poco de dinero a mano, advirtiendo que los cajeros automáticos podrían estar paralizados.

Pero los tiempos están cambiando. Hoy, las torres de celulares y las grandes tiendas minoristas normalmente tienen generadores de respaldo, lo que les permite procesar tarjetas bancarias durante un apagón. Y siempre hay cheques. A su debido tiempo, es probable que la tecnología de teléfonos inteligentes supere al resto de los demás medios de comunicación, y uno siempre pueda mantener un repuesto de recarga en caso de emergencia.

Tal vez la objeción más difícil y fundamental para deshacerse del dinero en efectivo tiene que ver con la privacidad, nuestra capacidad para gastar de forma anónima. Pero, ¿dónde trazar la línea entre el derecho individual y la necesidad del gobierno de gravar, regular y hacer cumplir la ley? La mayoría de nosotros no quiere socavar al derecho de una persona para hacer una compra ocasional de US$200 con total privacidad. Sin embargo, ¿qué pasa con un auto de US$50.000 o un apartamento de US$1.000.000? Deberíamos ser capaces de limitar los problemas que he descrito aquí, garantizando al mismo tiempo que la gente común pueda seguir utilizando billetes pequeños para mayor comodidad en sus transacciones cotidianas.

¿No encontrará el sector privado nuevas maneras de hacer transferencias anónimas que eludan las restricciones del gobierno? Ciertamente. Pero mientras el gobierno evite que estos vehículos alternativos sean utilizados fácilmente por las tiendas al por menor o por los bancos, no podrán desempeñar el papel que hoy tiene el efectivo. Obligar a delincuentes y evasores de impuestos a recurrir a alternativas más arriesgadas y costosas complicará sus vidas y mermará la rentabilidad de sus negocios.


Algunos podrían sostener que la menor circulación de dólares estadounidenses sólo funcionará si existe una coordinación entre todas las grandes economías, ya que los delincuentes y evasores de impuestos estadounidenses podrían sencillamente convertir sus dólares a euros. Esto es muy improbable. Pocos puntos de venta de Estados Unidos aceptan euros, los bancos tienen que presentar informes sobre grandes depósitos en efectivo, y hay un tope de US$10.000 para la cantidad de dinero que se puede traer a o sacar de EE.UU. sin presentar un formulario de aduanas.

Es cierto que el gobierno estadounidense ahorra costos de financiamiento al imprimir una gran cantidad de dinero en lugar de, por ejemplo, emitir bonos del Tesoro que pagan intereses. Pero esa inundación de fondos en efectivo facilita la vida de los oligarcas rusos, los narcotraficantes mexicanos y los responsables del tráfico de personas a nivel mundial. El mayor ingreso que el gobierno conseguiría al eliminar el efectivo (y por lo tanto, reducir mucha evasión de impuestos) probablemente excederá los ingresos que el Tesoro de EE.UU. obtiene actualmente de engrasar las ruedas de la delincuencia mundial, sin tomar en cuenta los enormes beneficios directos e indirectos de tasas de delincuencia más bajas. En cualquier caso, si EE.UU. toma la delantera, otras economías avanzadas acabarían haciendo lo mismo por vergüenza.

El ángulo fiscal y la delincuencia son razones suficientes para destrozar las montañas de papel moneda del mundo. Hay, sin embargo, un motivo muy diferente y quizás sorprendente, que tiene que ver con la capacidad de los bancos centrales para hacer frente a las crisis financieras y recesiones profundas. ¿Por qué? Porque pese a toda la polémica en torno a la política fiscal, la política monetaria sigue siendo la primera línea preferida de defensa contra las recesiones.

La reducción de las tasas de interés proporciona un estímulo rápido y eficaz dando a los consumidores y a las empresas un incentivo para endeudarse. También eleva el precio de las acciones y de las viviendas, lo que hace que las personas se sientan más prosperas y quieran gastar más. La política monetaria anticíclica tiene un largo historial, mientras que las discusiones políticas siempre van a interferir con un estímulo fiscal oportuno y eficaz.

Desde 2008, sin embargo, la política monetaria ha comenzado a lucir cada vez menos ágil. La mayoría de los bancos centrales se ha encontrado que una vez que recortaron las tasas de interés a alrededor de cero, sus opciones eran bastante limitadas. Esto ha hecho que muchos bancos centrales deseen tener la capacidad de reducir las tasas de interés por debajo de cero.

¿Qué significa eso? Cuando un préstamo tiene una tasa de interés negativa, los pagos del deudor en realidad suman menos que la deuda original. Varios bancos centrales (como el Banco Central Europeo y el Banco de Japón) han experimentado con este tipo de medidas. Para los ahorradores, tiene el efecto contrario: El dinero que queda en un depósito bancario o en un fondo del mercado monetario sigue disminuyendo debido a las tasas de interés negativas.

En teoría, recortar las tasas de interés por debajo de cero debería estimular el consumo y la inversión de la misma forma en que lo hace la política monetaria normal, al fomentar el endeudamiento. Por desgracia, la existencia de dinero en efectivo entorpece este mecanismo. Si usted es un ahorrador, simplemente retirará sus fondos del banco y los convertirá en efectivo en lugar de ver que se reduzcan con rapidez. Enormes sumas pueden ser retiradas para evitar tales pérdidas, lo que podría hacer que sea difícil para los bancos hacer préstamos, anulando por lo tanto el propósito de la política.

Eliminar el efectivo o hacer que el costo de acapararlo se vuelva suficientemente alto, sin embargo, allanaría el camino para que los bancos recorten las tasas a territorio negativo tanto como sea necesario en una recesión severa. Las personas podrían acaparar billetes pequeños, pero los costos probablemente serían prohibitivos para cualquier tasa de interés negativa realista. Si es necesario, los bancos centrales también podrían fijar cuotas temporales para los grandes retiros y depósitos de papel moneda.

A los economistas en general les gusta la idea de agregar las tasas de interés negativas al arsenal de herramientas de los bancos centrales. John Maynard Keynes la consideró en su gran obra “La teoría general del empleo, el interés y el dinero” (1936). Pero Keynes escribía en una era anterior a la banca electrónica, por lo que veía las tasas negativas como una idea totalmente poco práctica.

No todos son partidarios de las tasas negativas. La resistencia es particularmente fuerte en el sector financiero, al que le preocupa la dificultad de traspasarlas a los pequeños depositantes. Sin embargo, estas preocupaciones pueden ser aliviadas significativamente. Los bancos podrían ser compensados por permitir depósitos de tasa de interés cero de hasta, digamos, US$2.000 por persona.

A otros les preocupa que las tasas negativas lleven a los bancos y a todo el sector financiero a asumir riesgos imprudentes, lo cual ya es suficiente amenaza con tasas de interés en cero. Pero si una fuerte dosis de tasas negativas puede sacar a una economía de una recesión, debería poder hacer subir la inflación y las tasas de interés a niveles positivos con relativa rapidez, reduciendo posiblemente la vulnerabilidad a las burbujas en vez de aumentarla.

En resumen, hay numerosos temas a tener en cuenta, pero si se hace de forma gradual y adecuadamente, el balance de los argumentos se inclina claramente a favor de que pasemos a ser una sociedad que dependa mucho menos del dinero en efectivo.

¿Será alguna vez realidad? Creo que ha llegado el momento. Los ministerios de Hacienda están desesperados por recaudar más ingresos fiscales sin subir los impuestos, las agencias de seguridad interna están preocupadas por la forma en la que el dinero facilita la financiación del terrorismo, los ministerios de Justicia están más preocupados que nunca sobre el papel del efectivo en la delincuencia. Para las autoridades de inmigración, mientras tanto, reducir el efectivo seguramente es mucho mejor que la idea de erigir muros.

El efectivo es algo que conocemos íntimamente: forma parte de la trama de nuestras vidas y de nuestras experiencias como consumidores y empresarios. Pero los gobiernos han dejado que los suministros de dinero en efectivo se descontrolen, en beneficio de los delincuentes y los evasores de impuestos en todas partes. Es hora, por fin, de deshacerse de todos los billetes de US$100.




Kenneth Rogoff es el profesor de Políticas Públicas Thomas D. Cabot de la Universidad de Harvard y ex economista jefe del Fondo Monetario Internacional. Este ensayo es una adaptación de su nuevo libro, ‘The Curse of Cash’, algo así como ‘La maldición del efectivo’, que será publicado en EE.UU. en septiembre por Princeton University Press.

más inteligente que los demás

Los 10 rasgos que indican que eres una persona más inteligente que los demás



El Confidencial - lunes, 29 de agosto de 2016
Dicen que la inteligencia es la virtud mejor repartida: todo el mundo está contento con la que le ha tocado. Es cierto que es difícil que nos consideremos idiotas, pero en nuestro fuero interno siempre sabemos que hay cosas que se pueden mejorar.

Para no quedarnos con la duda de si nuestra inteligencia es real o fruto de nuestras propias fantasías grandilocuentes, hemos creado una guía con algunos de los rasgos que nos ayudarán a saber si estamos más cercanos a los niveles de Sócrates o de Ralph Wiggum.


1. Eres desordenado
En muchas ocasiones el desorden se ha asociado a la inteligencia. Pese a la insistencia de nuestras madres en mantener nuestras habitaciones adolescentes en un estricto orden, diversos estudios revelan que este tipo de personas tienden a ser más creativas en lo que concierne a la generación de nuevas ideas.

El todoterreno Alan Turing, padre de la computación se definía a sí mismo como un hombre desordenado, a pesar de que el campo de la criptografía, paradójicamente, requiere mucha organización. También conocido es el celebérrimo desorden de Albert Einstein, quien decía que “si una mesa abarrotada es síntoma de una mente abarrotada, entonces ¿qué debemos pensar de un escritorio vacío?”. A llenar las mesas.


2. No fumas
Las personas que mejores notas sacan durante la enseñanza obligatoria, al llegar a la edad adulta, se enganchan al tabaco en menor medida. Esto es lo que viene a decir un estudio realizado en el hospital Sheba Medical Center de Israel en 2010, en el que participaron más de 7.000 hombres.
Otra investigación, en este caso con 20.000 sujetos, reveló que las personas no fumadoras contaban con un coeficiente intelectual, de media, siete puntos más alto que los adictos al tabaco.


3. Estudiaste música

Como ya se ha comentado en alguna ocasión en este medio, estudiar música en la infancia o en la adolescencia ayuda a desarrollar multitud de capacidades, cognitivas e intelectuales, que influyen en el desarrollo posterior de las personas.
Mozart se adecuaba a esta descripción, pero no es solo cosa suya, porque un estudio realizado en 2004 con niños de seis años, apuntaba a que aquellos que tomaban clases de música veían aumentar su cociente intelectual.


4. Eres vago
Si eres de disfrutar de una buena sesión de vaguería y te deleitas con el no hacer nada, quizá seas más listo que la media.
La Universidad Gulf Coast de Florida afirma que las personas inteligentes pueden permanecer durante horas sin hacer nada, inmersas en sus propios pensamientos. Ya tienes la excusa perfecta: es por tu inteligencia superior.


5. Prefieres un gato como mascota

Un estudio de 2014 llevado a cabo por la Carroll University de Wisconsin reveló que las personas que viven con gatos suelen presentar un mayor cociente intelectual, aunque los dueños de perros resultaron ser más extrovertidos.
¿La razón? El estudio apunta a las diferencias de personalidad entre la gente que prefiere perros como compañía y quienes prefieren gatos. A estos últimos les consideran más hogareños, tendentes quizá a optar por realizar actividades de cariz intelectual en casa.


6. Aprendiste a leer pronto
También comentado por este diario, un estudio realizado en 2012 en Reino Unido a casi 2.000 parejas de gemelos reveló que el hermano que había aprendido a leer antes contaba con mejores habilidades cognitivas.
Un arma de doble filo para la competitividad entre hermanos, teniendo en cuenta, además, que hay estudios que apuntan a que el hermano mayor cuenta con más inteligencia. La polémica está servida.


7. Eres de izquierdas
Un estudio realizado a finales de los setenta realizado en la Universidad de Ontario apuntaba a que las personas menos inteligentes tendían a desarrollar prejuicios racistas u homófobos en mayor medida. Además, concluía que las personas con ideas progresistas a menudo contaban con una mente más abierta a nuevas ideas y conocimientos.
Más reciente es otra investigación, llevada a cabo en Estados unidos por la psicóloga Satoshi Kanazawa, que concluyó que los niños con mejores calificaciones en la escuela tenían más posibilidades de desarrollar ideologías orientadas a la izquierda. Revisemos nuestras calificaciones por si acaso.


8. Has probado alguna droga 
Las drogas suelen afectar de manera negativa a nuestras conexiones neuronales, pero una investigación realizada en 2012 por la Universidad de Cardiff reveló que las personas que presentaban más alto cociente intelectual consumían, alguna vez, alguna droga blanda.
Se cree que este comportamiento responde a un espíritu crítico y más reflexivo que les empuja a conocer empíricamente los efectos de las mismas. En definitiva, que si se dedican a perder neuronas es porque van sobrados. Sin embargo, el mismo estudio comprobó que esas personas no prolongan el consumo de drogas de forma continuada, sino esporádicamente.


9. Tienes insomnio
Diversos estudios apuntan a que las personas más inteligentes tienen más problemas para dormir. A razón es que el fluir de pensamientos está mucho más activo en ellas, de manera que les es más difícil relajarse, además de que suelen desarrollar más estrés. También prefieren hacer vida por la noche, ya que favorece su creatividad y su desarrollo.



10. Dudas de tu inteligencia 

Decía Jorge Luis Borges que la duda es uno de los nombres de la inteligencia. Los necios a menudo son los que más conformes están con los conocimientos que tienen en su haber, mientras que las personas inteligentes ansían abrir la puerta de la curiosidad, que no hace sino llevarles a más puertas en una necesidad infinita de aumentar sus conocimientos. Se cumple aquello de que cuanto más conocemos más nos damos cuenta de que nos queda mucho por aprender.

innova

 ¿Necesitar vender más?, innova en el empaque de tus productos



América Economía - martes, 30 de agosto de 2016
El empaquetado de productos, más allá de mostrar a la marca y proteger el producto, cumple un rol vital en la decisión de compra frente al consumidor. El empaque brinda la primera impresión al cliente y determina su atención, por ello las empresas son cada vez más conscientes de la manera cómo presentar sus productos.

Especialistas del Diplomado de Diseño y Gestión del Packaging de Toulouse Lautrec, resumen las cinco tendencias de packaging que marcan este último año:


1. Enfocarse en los millennials
Las generaciones más jóvenes, representan un tercio de la población mundial y gastan alrededor de 600 millones de dólares anuales, influyen a sobre manera en las tendencias del mercado. Es así que han convertido el diseño y presentación de productos en un factor relevante sobre la toma de decisiones en cuestiones a compras. Se conoce que 3 de cada 4 millennials eligen productos sanos y en empaques ecológicos ya que buscan la sostenibilidad del mismo. Esto, sin duda, está dominando las compras en el mercado.


Ideas sencillas que hicieron millonarios a sus inventores


2. Pequeño y minimalista
Tanto las familias como los hogares se han reducido en los últimos tiempos, situación que ha obligado a las empresas a adaptarse a una menor escala con presentaciones y empaques sencillos con facilidades para abrir y trasladar.


3. Transparente
Es sencillo: los clientes desean saber cómo son sus productos antes de decidir la compra, entonces, la tendencia marca a empaquetados transparente y con aberturas.


4. Ecológicos y sostenibles
La creciente consciencia de los consumidores sobre el origen de los productos que comprar y en cuánto afecta al medio ambiente han girado a las empresas a incluir información sobre la sostenibilidad de sus empaques que, recientemente, están hechos de materiales reciclados y amigables al ambiente.


5. Doble uso
El packaging logra, en muchos casos, ser parte de la vida del consumidor casi como un producto. Por esto, las marcas deben diseñar empaques que tengan otro uso.