Un estudio muestra evidencias del
impacto del cambio climático en la Amazonía peruana
EFE - junio de 2014
Un estudio realizado durante
siete años y publicado esta semana en Lima muestra las evidencias del impacto
del cambio climático en la biodiversidad de la Amazonía peruana, informó hoy el
Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp).
El estudio, titulado "Cambio
Climático y fauna silvestre en la Amazonía peruana", revela el impacto que
el cambio climático ha tenido en la biodiversidad y las poblaciones locales de
la Reserva Nacional Pacaya Samiria, en la región selvática de Loreto, señaló el
Sernanp en un comunicado.
"La publicación evidencia
que en los últimos cinco años la Amazonía peruana está teniendo un impacto
debido al cambio climático que ha provocado una época de sequías e intensas
inundaciones afectando la biodiversidad y a la población local", detalló
el presidente de la Fundación Latinoamericana para el Trópico Amazónico
(FundAmazonía), Richard E. Bodmer.
La investigación fue elaborada
por especialistas del Sernanp y de FundAmazonía, que observaron los cambios que
el calentamiento global ocasiona en la selva peruana, así como las posibles
soluciones naturales a este fenómeno.
Los especialistas estudiaron las
más de 2'080.000 hectáreas de Pacaya Samiria, ya que según el estudio,
"los bosques inundables son particularmente importantes para entender el
impacto del cambio climático en la Amazonía, puesto que los hábitats son más
sensitivos a las variaciones estacionales".
"El cambio del nivel del
agua es un indicador de la fluctuación climática, por lo que las inundaciones y
sequías constituyen impactos físicos que tienen efectos directos en la fauna
silvestre", detalló el estudio.
En ese sentido, se determinó que
las alteraciones estacionales de la reserva se intensificaron progresivamente,
acentuándose entre los años 2009 y 2012.
En 2009, el río Amazonas registró
un nivel muy alto, inundando grandes áreas de bosques, mientras que en el 2010
registró su nivel más bajo, lo que llevó a considerar esta condición como
sequía extrema.
En 2011, la creciente del río
excedió los niveles presentados en 2009, y en 2012 las inundaciones tuvieron
una mayor magnitud que en años anteriores, superando los máximos registros de
las crecientes.
Estos cambios hidrológicos
ocasionaron que las poblaciones de fauna silvestre y las de peces, delfines, manatíes
y aves acuáticas, disminuyeran durante y después de las sequías, afectando la
cadena alimenticia.
La publicación fue presentada en
el marco del Día Mundial de la Preservación de los Bosques Tropicales, que se
celebrará el próximo jueves, y a seis meses de la Conferencia de las Partes
sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas (COP20), que reunirá en Lima a
representantes de 194 países del 1 al 12 de diciembre próximo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario