Ruletas, salones privados y
‘conejitas’
Cinco Días - viernes, 15 de
agosto de 2014
Si quiere pasar al gran salón de
póquer del Bellagio prepare al menos 20.000 dólares, la apuesta mínima. Esta es
uno de las exclusivas instalaciones que muchos identifican como el mejor casino
de Las Vegas. Pero tiene mucho más. Construido en 1998, donde se levantaba el
antiguo Dunes, su hotel cuenta con 4.000 habitaciones, con áticos VIP, 2.400
máquinas tragaperras, spa, teatro para el Circo del Sol, jardín botánico, lago,
tiendas de lujo e incluso, por si se quiere casar, dos capillas que celebran
bodas. Está situado en el strip de la ciudad, el epicentro mundial del juego,
junto a otros como Caesars Palace o el The Mirage, aunque la ruleta gira con
mucho estilo también en otros lugares.
Macao (China) se ha convertido en
Las Vegas de Asia, con decenas de casinos. Allí, el gigantesco The Venetian,
con sus canales navegables en góndola, brilla sobre todos los demás. Su lujosa
suite Cielo ocupa 355 metros cuadrados. En Singapur destaca Marina Bay Sands,
dentro de tres espectaculares rascacielos en la bahía, que se han convertido en
la imagen de la ciudad. Su centro comercial acoge al mayor número de boutiques
de lujo del mundo.
Si lo que busca es relax, junto a
la adrenalina del juego, el destino perfecto es el resort caribeño Atlantis
Paradise Island (Bahamas). Blackjack, baccarat, dados, ruleta y póquer caribeño
combinan con playas de arena blanca, acuario e incluso un parque acuático.
Europa no ofrece esos grandes
parques temáticos del juego. En el Viejo Continente destaca el glamour. El
Kurhaus de Baden Baden (Alemania), inaugurado en 1809 y reabierto en 1950,
reúne a la élite europea desde hace décadas, que acuden al colindante y afamado
balneario. Su lujoso interior se inspira en el Palacio de Versalles. Aunque el
sinónimo de opulencia y gente guapa es por excelencia el de Monte-Carlo
(Mónaco). Construido en 1863, en un edificio de estilo belle epoque, su
exterior reúne una alta concentración de ferraris, maseratis o porsches.
Dentro, los clientes más exclusivos pueden disfrutar de salones privados para jugar.
Junto al clásico de Estoril, en Portugal, hay otro lugar de moda para muchos
adinerados europeos, Comporta, donde viajan para disfrutar de sus playas. En
verano, su Casino de Tróia (en el hotel del mismo nombre), es un lugar de
obligada visita.
Uno de los hoteles más
prestigiosos de Europa, el Ritz de Londres, acoge en su interior un casino
perfecto para el agente James Bond, con ruleta americana, blackjack y póquer a
tres cartas. Abre las 24 horas del día y siete días en la semana. Otro club
londinense, más mundano y bien particular, es el Playboy Club London, atendido
por las famosas conejitas de la revista Playboy, con salones privados para
quien quiera apostar miles de euros contra la banca. En España, el Ibiza Gran
Hotel, de cinco estrellas, acoge un casino de lujo con spa y cocina
mediterránea en los restaurantes The Jackpot y La Gaia, con música en vivo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario