Los 7 síntomas que preceden a un
crash bursátil
Estrategias de Inversión -
martes, 28 de octubre de 2014
Ni dos semanas de respiro para
los alcistas y el mercado ha vuelto a ser invadido por osos. Hay siete señales
que nos ayudan a identificar si estamos ante un auténtico pillaje de
bajistas...y además las encuestas de sentimiento no ayudan a pensar en nuevos
máximos. ¿Cuáles son esos indicadores?
El fatídico 16 de octubre ha
dejado a muchos con la espinita clavada -de no haberlo sabido antes- y el miedo
en el cuerpo. Pues bien... no han pasado ni dos semanas y los indicadores de
sentimiento nos dicen ya que la cosa puede no pintar demasiado bien. Hay tres
aspectos que mosquean, nos decía este lunes José Luis Cárpatos, y dos de ellos
relacionados con la opinión de los minoristas:
-El indicador de sentimiento del
AAII (Asociación Americana de Inversores Individuales) se va posicionando. Por
tercera semana consecutiva suben los alcistas hasta representar la mitad del
mercado y, por el contrario, ceden los bajistas que se colocan ya a las puertas
de descender del 22% de cuota. ¿Dónde está el problema? En que se utiliza
normalmente como un indicador de sentimiento contrario.
-El Bullish Consensus, elaborado
por Market Vane. Los alcistas representan un 56%, frente al 52% de la semana
anterior. Su caso es el opuesto dado que sus lecturas han sido capaces de
predecir grandes desplomes de la bolsa. Son consultas a profesionales del
sector, conocidos como CTAs, Commodity Trading Advisors, y no a minoristas.
La cuestión es que la barrera
aquí se fija en el nivel del 67% como media de las últimas cuatro semanas a
partir del cual se empieza a hablar de un fuerte sentimiento alcista. En la
actualidad, este indicador se coloca en un 55,5%, con lo que está lejos de
anticipar la continuación de una tendencia alcista.
-La mano que mece la cuna. ¡Qué
sería de la mitología bursátil sin ellos los programas de trading ocupan un
lugar privilegiado a la derecha de los hedge funds... y esta semana pasada se
lucieron. Lanzaron operaciones de ultra corto por el 53,2% del total del
volumen de sus negociaciones.
Las 7 señales ante el abismoHay
siete características, mitad psicológicas, mitad reales, que pueden predecir un
crash bursátil, según apunta William J. O`Neill, presidente y fundador de
Investors Business Daily, como sacaba a relucir el analista Moisés Romero para
La carta de la bolsa. ¿Cuáles son esos siete puntos?
Primero. La debilidad. El hecho
de que las acciones que lideran el mercado comiencen a perforar soportes
importantes o que acciones con una tendencia alcista continuada empiecen a
quebrantarla. A este respecto, ¿qué ocurre en el Ibex 35? Banco Santander no sabe
respetar su soporte en 7 euros, mientras que BBVA se la juega en los 8,5 euros,
nivel del que aún se encuentra alejado. No tienen, sin embargo, apoyo alguno de
Telefónica, anclada en la zona de 11,20 euros.
Cabe resaltar, no obstante, la
mala racha que han vivido las compañías de pequeña y mediana capitalización y
cuyos índices acumulan pérdidas superiores al 7% y 6%, respectivamente, después
de años de expansión.
Segundo. Lo que denomina como
"la maldición de los meses de septiembre y octubre" y no le falta
razón. Más allá del pasado 16 de octubre, si echamos la vista atrás
comprobaremos cómo el crash del sistema financiero internacional a raíz de
Lehman Brothers se produjo en octubre de 2008 o el estallido de la burbuja de
las puntocom que arrancó a principios de septiembre del 2000.
Tercero. La especulación. Decía
O´Neill que aumenta el ansia de compra-venta de los institucionales y, aunque
es cierto que en esto momento no se puede identificar un alto grado de
especulación, en su opinión, sí hay compañías que "vuelan" demasiado
alto, como es el caso de Linkedin, Twitter o Facebook.
Cuarto. La opinión de los mass
media. Una portada puede generar un estado de ánimo o de opinión y, aunque no
creen ellos la corrección de las bolsas, sí generan un ambiente de cierto
recelo y desconfianza. ¿Conclusión? Todo lleva hacia las ventas.
Quinto. Debe haber un
catalizador, un elemento que provoque la gran caída. "La mayoría de los
crash bursátiles suceden cuando el mercado ya está en tendencia bajista",
reconoce Timothy Sykes, trader profesional y short seller.
En el caso de esta última
corrección -que podría ser la antesala del crash- tenemos donde elegir: el fin
de la retirada de las ayudas en Estados Unidos por parte de la Reserva Federal;
el peligro de una tercera recesión en Europa; unos beneficios empresariales que
no terminan de despertar; China y su ralentización económica; el crudo por los
suelos y las commodities volando alto...y, por último, el ébola. Ya no se habla
de la esta terrorífica pandemia y eso que no han pasado ni quince días.
Sexto. Un gran rebote. Resultado
de que los bajistas no lo son eternamente y el miedo no domina el mercado.
Séptimo. Y puede que uno de los
puntos más a tener en cuenta: "los crash raramente se producen en los
puntos más altos". ¿Qué quiere esto decir? ¿Qué la gran corrección debería
llegar cuando un índice como el S&P 500 supere los 2.000 puntos? ¿O más
bien que puede llegar ahora cuando nadie se lo espera? Y después de tanta caída
los mercados están lejos de acercarse a cifras redondas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario