récords

Por qué Berlín es el mejor lugar para romper récords

BBC News - ‎lunes‎, ‎29‎ de ‎septiembre‎ de ‎2014

El ser humano alcanzó un nuevo hito en su capacidad física. Por primera vez en la historia una persona fue capaz de correr los 42,195 kilómetros de un maratón en menos de dos horas y tres minutos.

El responsable fue el keniano Dennis Kimetto, quien paró el reloj en 2:02'57" en la edición número 41 del maratón de Berlín para rebajar en 26 segundos el anterior registro que había establecido su compatriota Wilson Kipsang hace doce meses en el mismo escenario.

De hecho, el recorrido de la capital alemana ha sido testigo de siete de los últimos nueve récords desde que el brasileño Ronaldo da Costa lograra batir en 1998 (con un tiempo de 2:06'05") una marca que había permanecido vigente durante diez años.

Pero ¿por qué Berlín es considerado el paraíso de los maratonistas?

Recorrido

Una de las características que atrae a los principales maratonistas a correr en Berlín es su recorrido, que además de no ofrecer elevaciones drásticas, pasa por los principales hitos turísticos de la ciudad.

El brasileño Rolando da Costa impuso una nueva marca para el maratón en 1998, siendo el primero de los siete récords que se han logrado en Berlín desde entonces.

La única dificultad que se presenta en una ruta predominantemente plana es a partir del kilómetro 32 donde aparece un ascenso constante, pero sólo es por cuatro kilómetros y sin una inclinación considerable.

En términos de elevaciones, el maratón comienza a 34 metros sobre el nivel del mar y termina a 27 metros, siendo el punto más alto del recorrido el punto de 78 metros sobre el nivel del mar que llega antes del kilómetro tres.

Otros factores son la superficie lisa y la fluidez de la ruta, que se basa en largas rectas sin curvas cerradas o esquinas, lo que favorece un ritmo de carrera sin interrupciones.

Clima

El maratón, que se disputa a finales del mes de septiembre ya entrado el otoño en el hemisferio norte, ofrece una temperatura más fresca y de menos humedad.

Berlín ofrece las características ideales de recorrido y clima para mejorar el tiempo del maratón.

Antes de la carrera, Kimetto reconoció que su objetivo era lograr el mejor tiempo del mundo "si las condiciones son buenas". Su deseo se cumplió.

A la hora de la salida de la carrera la temperatura del ambiente era de 8º C, que se considera ideal para las pruebas de larga distancia, con un cielo seminublado, poco viento y una humedad cercana al 60%.

La fecha en la que se corre también favorece el entrenamiento de los atletas para alcanzar su plenitud física, luego de haber probado su estado de forma en otros maratones a lo largo del año, como el de Londres, Nueva York o Boston.

Objetivo común

Con la ruta definida y el clima favorable, el otro elemento crucial para optar por un récord es el de los marcadores de paso, los atletas que tienen como único objetivo establecer un elevado ritmo de carrera durante una parte del recorrido.

Dennis Kimetto felicita a su compañero de entrenamiento y rival Enmanuel Mutai, quien también rebajó el tiempo del anterior récord.

Muchos de los maratones más famosos del mundo no aceptan este tipo de participantes, pero Berlín no sólo les abre las puertas, sino que los promueve.

En el grupo de élite de este año Kimetto estuvo junto a su compañero de entrenamiento, Emmanuel Mutai, y Geoffrey Kamworor, quien ganó la medalla de oro en la prueba de media maratón en marzo de este año.

Entre ellos se estableció el objetivo de mejorar la marca anterior de Kipsang.

Desde el inicio de la prueba se fueron mejorando los tiempos en cada uno de los parciales hasta pasar por el ecuador de la carrera en 1:01'45".

Kamworor aguantó hasta poco más de la señal de 30 kilómetros, que fue cuando entró en acción la rivalidad entre Kimetto y Mutai.

El maratón de Berlín también pasa por lugares emblemáticos de la ciudad como la puerta de Brandeburgo.

Mutai atacó en repetidas ocasiones, pero fue Kimetto el que hizo daño con un cambio de ritmo a cinco kilómetros del final.

"Me sentí bien en la salida y sobre el final creí que era posible batir el récord. Es posible mejorarlo aún más. Me gustaría venir el próximo año y tratar de bajarlo otra vez", dijo Kimetto.

Tal fue el ritmo marcado por los amigos y compatriotas que ambos corrieron la segunda mitad de la prueba más rápido que los primeros 21 kilómetros.

Mutai, que también bajó el anterior récord tras llegar a tan solo 16 segundos de su compatriota, cree que no se puede descartar que se rompa la barrera de las dos horas en un futuro no muy lejano.

"Por lo que vi hoy, los tiempos van bajando cada vez más. Si no es hoy, será mañana. Tal vez la próxima vez lleguemos a las dos horas y un minuto", dijo el corredor de 29 años.