Cinco razones que explican por qué las mujeres
viven más que los hombres
El Confidencial - noviembre de 2014
No es ningún secreto: las mujeres viven más que
los hombres. De media, en nuestro país, las mujeres viven en torno a seis años
más que los hombres. Y, aunque cada vez vivimos más, la brecha de género se
mantiene.
No cabe duda de que en nuestra sociedad las
mujeres siguen teniéndolo más difícil en términos laborales y económicos, pero
en lo que respecta a la salud, llevan la ventaja. Según explica en Health la
doctora Marianne Legato, profesora emérita de la Universidad de Columbia y
directora de la Foundation for Gender-Specific Medicine, “los hombres tienen
desventajas biológicas y sociológicas desde el momento en que son concebidos
hasta que mueren”. O, si se prefiere, las mujeres tienen determinadas ventajas.
Son estas.
1. Las mujeres son más fuertes en el útero
Aunque la cifra de embriones masculinos es
ligeramente superior en el momento de la concepción, la tasa de abortos
precoces entre estos es también mayor. Según Legato, los chicos son más
propensos a sucumbir a una infección prenatal u otros problemas, por lo que,
aunque su concepción sea más alta, nacen en prácticamente igual número que las
mujeres. “Son también más lentos en su desarrollo prenatal que las mujeres, lo
que significa que mueren con más facilidad si el parto es prematuro, ya que su
pulmón y cerebro están menos desarrollados”, añade la doctora.
2. Las mujeres son menos temerarias
Según datos del Intitute for Health Metrics and
Evaluation, en 2010 la quinta causa de discapacidad entre los hombres españoles
fueron las caídas, y la octava los accidentes de tráfico. Entre las mujeres las
caídas bajan a la novena posición y los accidentes de tráfico a la decimoctava.
Legato asegura que esto tiene una explicación
biológica: el lóbulo frontal del cerebro –que se encarga, entre otras cosas, de
calcular los riesgos de una u otra acción– se desarrolla de forma mucho más
lenta en los hombres que en las mujeres. Esto hace que los hombres tengan una mayor
propensión a enfrentarse, voluntariamente, a situaciones peligrosas. “De forma
casi inevitable un hombre va a hacer cosas arriesgadas que una mujer de su
misma edad no haría”, zanja Legato.
3. Las mujeres desarrollan problemas
cardiovasculares más tarde
Las enfermedades y accidentes cardiovasculares
son la principal causa de muerte en el mundo desarrollado entre hombres y
mujeres, pero los hombres tienen más posibilidades de enfrentarse a ellas a los
30 o 40. De media, las mujeres desarrollan problemas cardiovasculares diez años
más tarde que los hombres. Y esto, según explica Legato, también tiene una
explicación biológica: gozan de una mayor protección frente a los problemas
cardiovasculares hasta la menopausia, ya que sus cuerpos producen grandes niveles
de estrógeno, una hormona que ayuda a mantener las arterias fuertes y
flexibles.
4. Las mujeres tienen vínculos sociales más
fuertes
Según un estudio de la Brigham Young University
publicado en 2010, las personas que mantienen buenos amigos en la vejez tienen
un 5% menos posibilidades de morir que aquellos que apenas tienen. Unas
conclusiones similares a las que llegó el estudio longitudinal con mayor
duración de la historia, el Terman Study of the Gifted: "El beneficio más
claro de las relaciones sociales viene de ayudar a los demás. Aquellos que
ayudaban a sus amigos y sus vecinos, aconsejando y cuidando de los demás,
tendían a vivir más que el resto".
Legato cree que las mujeres tienden a hacer
nuevos amigos en la vejez con más facilidad, lo que les ayuda a ser más
longevas. Hay una excepción: los hombres casados, que suelen tener más salud y
vivir más que los hombres solteros o viudos.
5. Las mujeres se cuidan más
Según la Agency for Healthcare Research and
Quality, los hombres visitan al médico un 24% menos que las mujeres y son un
22% más propensos a saltarse los controles de colesterol. Es más, un 28% de los
hombres ni siquiera tienen un médico de cabecera al que acudan siempre. Son
datos estadounidenses, pero en España ocurre algo parecido. Cuando los hombres
van finalmente al centro de salud, se encuentran peor que las mujeres, y los
tratamientos empiezan más tarde.
No hay comentarios:
Publicar un comentario