Alza de la bolsa de Brasil
muestra que los inversores esperan lo peor
Reuters - sábado, 5 de
abril de 2014
Las acciones brasileñas han
subido con fuerza en las recientes jornadas, pese a que el panorama económico y
empresarial se ha deteriorado y de que algunos inversores esperan que la
situación empeore.
Tras años de quejarse de una mala
gestión económica de la presidenta Dilma Rousseff y de cómo esto ha provocado
una pérdida de valor de las empresas estatales, los inversores se apegan a la
idea de que las perspectivas en Brasil han sido menoscabadas lo suficiente como
para provocar un cambio.
"Lo irónico es que mientras
peor se ponga la situación, más van a subir los mercados, porque significa que
hay una mayor probabilidad de que (el Gobierno) pierda la elección", dijo
Frederico Mesnik, socio de Humaita Investimentos.
Una encuesta mostró recientemente
la primera baja de la aprobación del Gobierno desde julio , impulsando a las
acciones. El avance reforzó a Brasil en medio de una corriente alcista en los
mercados emergentes debido a una mayor inclinación de los inversores al riesgo.
Si bien aún se espera que
Rousseff se reelegida en octubre, su Gobierno ha perdido apoyo porque los
brasileños se quejan de los altos precios de los alimentos y el temor a una
posible alza del desempleo.
Los posibles cortes de
electricidad y manifestaciones durante el Mundial de Fútbol en junio y julio
son amenazas para las posibilidades de Rousseff.
Si bien las valoraciones de las
acciones eran bajas, la corriente alcista fue inesperada, especialmente
considerando el pesimismo sobre la economía brasileña. Un sondeo hace apenas
dos semanas había mostrado que los analistas esperaban que al índice Bovespa de
Sao Paulo le tomara todo el año conseguir el avance que ha logrado en quince
días.
"El mercado se metió en la
cabeza que si la oposición gana es bueno para el mercado, y que si Rousseff
gana va a estar debilitada y tendrá que cambiar la manera en que ha manejado la
economía", dijo Mesnik.
En tres semanas, el índice ha
subido casi un 14 por ciento, borrando prácticamente toda la pérdida que
acumulada en el año.
En el mismo período, Brasil ha
sufrido una baja de su calificación crediticia por parte de Standard &
Poor's , la confianza del sector industrial cayó a un mínimo de cuatro años y
las perspectivas para la economía se han deteriorado.
Las expectativas de crecimiento
para este año han caído a un 1,69 por ciento, según una encuesta semanal del
banco central, mientras que las expectativas de inflación para final del año
han subido a un 6,3 por ciento, cerca de la parte alta del rango meta oficial.
Los analistas también son
pesimistas sobre el panorama para las empresas brasileñas, pese a un buen
desempeño de sus operaciones en el cuarto trimestre.
"El mercado reacciona muy
poco a los resultados", dijo William Castro Alves, analista de XP
Investimentos en Sao Paulo. "Por ahora se trata menos de los fundamentos
(...) dado el pesimismo sobre la economía y el marco de política
económica", agregó.
La encuesta política que impulsó
al mercado mostró una baja en el apoyo al Gobierno de Rousseff a un 36 por
ciento desde un 43 por ciento del sondeo anterior, pese a que no está claro si
eso se traducirá en un cambio en las intenciones de voto.
"Esperamos que el camino al
día de la elección sea tortuoso y que haya mucha volatilidad", escribió el
analista de BTG Carlos Siqueira. "Por ahora, mantenemos una visión cauta
frente al mercado bursátil de Brasil", comentó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario