Barcelona

El lado oscuro del Barcelona

El Gráfico Diario - ‎viernes‎, ‎25‎ de ‎abril‎ de ‎2014

Ante los malos resultados que le abrieron las venas al Barcelona Fútbol Club, no cabe en el uso aséptico de la palabra exitismo una explicación –por lo menos en el reino del fútbol– que allane el camino para entender y, en el mejor de los casos, justificar la andanada de críticas al equipo dirigido por el argentino Gerardo Martino de parte de los medios de comunicación de casi toda España y de cientos de hinchas blaugranas.

Sin embargo, tras quedar afuera de la UEFA Champions League, de perder la final de la Copa del Rey ante el Real Madrid y quedar lejos del primer puesto en la Liga española, la ausencia de éxitos deportivos echó luz sobre algunas cuestiones poco menos que cuestionables.

Mientras en estos días se desarrollará el referéndum al que los socios han sido convocados para decidir si entregan un cheque de 600 millones para reconstruir el mítico Camp Nou y crear un espacio barcelonista a su alrededor, construyendo un nuevo Palau Blaugrana, el Barcelona digiere la sanción que le impuso la FIFA por la que no podrá fichar a ningún jugador nacional ni extranjero hasta el verano de 2015.

Así se lo comunicó la Comisión Disciplinaria de la FIFA por la inscripción y contratación irregular de jugadores menores de 18 años desde 2009 hasta 2013.

El máximo organismo aseguró que el club fue castigado por “dos períodos consecutivos y completos” –los próximos mercados de verano e invierno– a la vez que lo condenó a pagar una multa de 450.000 francos suizos –unos 370.000 euros–.

La FIFA, que también ha sancionado por el mismo motivo a la Real Federación Española de Fútbol, ha dado un plazo de 90 días al Barcelona “para regularizar la situación de todos los jugadores menores afectados”.

Una denuncia anónima presentada por un club europeo abrió la investigación hace un año, la cual constató que el Barcelona infringió, según la FIFA, el artículo 19 del Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores, que prohíbe los traspasos de menores de 18 años.

El escándalo no es menor, si se tiene en cuenta que Josep Maria Bartomeu pasó de vicepresidente a ser la máxima figura del club tras la dimisión de Sandro Rosell, investigado por el pase del futbolista Neymar Junior, y de quedar al borde de la imputación por la querella de “apropiación indebida” de 38 millones de euros de la transferencia del brasileño, por quien habrían pagado 57 millones.

Incómodo ante la sanción de la FIFA y ante los malos resultados obtenidos por el técnico argentino que su directiva decidió contratar, Bartomeu intentó dar un una explicación a este duro presente hablando de una mano negra que persigue al club, tras los problemas fiscales de Lionel Messi y las irregularidades cometidas en la contratación de Neymar.

“Tenemos evidencias que nos llevan a pensar que nos quieren hacer daño. Es todo muy extraño. A alguien no le gusta que estemos donde estamos. Al final todo se sabe: no pararemos hasta saberlo y lo denunciaremos”, avisó.

Así como no todo lo que brilla es oro, tanto en cuestiones futboleras como institucionales, tras la eliminación de la Copa del Rey los jugadores fueron duramente increpados por los hinchas tras llegar de Valencia a Barcelona. Acusaciones xenófobas de toda índole acerca de que el equipo se habría “argentinizado” y de que su máxima figura –Messi– estaría cuidándose de exigirse demasiado para estar en óptimas condiciones en el Mundial Brasil 2014 son algunas de las injurias que debieron sufrir los jugadores del conjunto barcelonés durante la semana posterior a la derrota contra su clásico rival en el estadio del Valencia.

Tanto es el escarnio tras la falta de títulos que hasta el propio Pep Guardiola –quien supo sufrir durísimas internas políticas durante su exitosísimo paso como DT del club– tuvo que salir a defender a Messi durante la conferencia de prensa en el estadio del Real Madrid, horas antes de la primera semifinal por la Champions como técnico del Bayern Munich.

“Lo que yo pueda opinar de Messi no cambia por el hecho de que el equipo esté mejor o peor o porque él esté mejor o peor. Para mí, Messi es demasiado grande como para que cambie mi opinión. Nunca he visto a nadie como él”.

Mientras tanto, el presidente ya anunció que presentarán un recurso de apelación para obtener una medida cautelar que les permita incorporar futbolistas durante los fichajes que se abrirán a partir del 30 de junio. A la vez que dijo que si la FIFA no retira la sanción, el Barcelona acudirá al Tribunal Arbitral del Deporte.

Ante este panorama, no son pocos los que hacen especulaciones en torno al futuro de Messi. Tras saldar en 2013 sus deudas con el fisco español mediante un “pago reparatorio” de 5.016.542,27 euros por no declarar presuntamente 4,1 millones de euros en los ejercicios 2007, 2008 y 2009, correspondientes a los derechos de imagen del jugador, hay quienes aseguran que el futuro de Lio está lejos de Cataluña.

Por más que algunos directivos azulgranas se apresuren en informar que lo convertirán en el mejor futbolista pago de todo el mundo. Sin embargo, la cláusula de 200 millones de euros que el Manchester City estaría dispuesto a pagar por el jugador allanaría el camino para que el exitismo en torno a Messi y el Barcelona deba pasar por la aduana hacia otro país más sosegado.