El ser humano ya no podrá correr más rápido, ni saltar más alto, ni ser más fuerte porque está alcanzando sus límites físicos.
Ésa es la conclusión de expertos del Instituto de Investigación Biomédica y Epidemiológica del Deporte en Francia.
Los investigadores afirman que dentro de 20 años no habrá más marcas deportivas porque "se habrá alcanzado el límite de las capacidades fisiológicas de la raza humana".
Y algunos deportes incluso podrían alcanzar sus límites más pronto, dice el estudio publicado en la revista de la Biblioteca Pública de Ciencias, PLoS One.
"Es un estudio interesantísimo" dijo a BBC Ciencia Carlos Cordente, profesor de la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte de la Universidad Politécnica de Madrid.
"Por supuesto que estamos llegando a los límites, pero el ser humano es siempre capaz de superarse".
"El problema es que hay muchos récords que son sospechosos y será muy difícil batirlos por medios legales", agrega el experto.
Controversia
Los marcas mundiales en deporte representan la más alta expresión del rendimiento muscular del ser humano, ya sea por velocidad o fortaleza.
Según los autores el análisis y predicción de los límites fisiológicos humanos siempre han sido motivo de controversia científica.
Los científicos analizaron 3.263 récords mundiales en pista y campo, natación, ciclismo, patinaje de velocidad y levantamiento de pesas.
Los registros iban desde 1896, cuando comenzó el cronometraje en las primeras Olimpiadas de la era moderna, hasta 2007.
Encontraron que de 1896 a 1968 se rompieron claramente y con frecuencia los récords deportivos.
Posteriormente, sin embargo, disminuyó el número de plusmarcas mundiales y en algunos casos se detuvo completamente.
Un ejemplo, afirman los autores, son los 10,49 segundos que Florence Griffith-Joyner logró en la carrera de 100 metros en Seúl en 1988 y que hasta ahora nadie ha logrado batir.
"Florence Griffith hizo dos plusmarcas a las que nadie se ha podido siquiera acercar-afirma el profesor Cordente- una de ellas con casi 3 décimas, que es un mundo".
"La cuestión es que éstos son récords altamente sospechosos y habría que plantearse una investigación para ver si fueron conseguidos de manera legal y si no, borrarlos de la lista de récords".
"Porque es muy dañino para un deporte como el atletismo tener récords como ésos que nunca van a poder ser batidos", afirma el experto.
Los resultados de la investigación muestran que en 1896 los atletas funcionaban al 75% de sus capacidades fisiológicas.
Ahora -dicen los autores- hemos alcanzado el 99%, y si prevalecen las actuales condiciones para 2027 las marcas mundiales sólo lograrán mejorar un 0.05%.
Estas tendencias se confirman en todas las modalidades de esfuerzo físico, ya sea actividad aeróbica (el patinaje de velocidad), anaeróbica (levantamiento de pesas), el uso de miembros inferiores (ciclismo), miembros superiores (lanzamiento de bala) y rendimiento (caminata).
Nuevas medidas
Dentro de 20 años la mitad de las disciplinas deportivas habrán llegado a su límite.
Para 2060, la única forma de registrar nuevas marcas en eventos como los 100 metros será medir con milésimas de segundo, en maratones con centésimas de segundo y en levantamiento de pesas en gramos.
E incluso así, dicen los investigadores, tomará 50 años batir un nuevo récord.
Los autores admiten que las modificaciones en los reglamentos deportivos y el fortalecimiento de los controles antidopaje quizás han tenido un impacto en las marcas deportivas.
Pero agregan que este fenómeno sólo confirma el hecho de que estamos muy cerca de alcanzar los límites físicos humanos.
A pesar de que durante los pasados 40 años la ciencia del entrenamiento y nutrición deportiva ha mejorado radicalmente, las marcas no han avanzado al mismo ritmo.
"Tanto los avances en entrenamiento deportivo como los materiales que se utilizan aportan muchísima mejora", dice Carlos Cordente.
"Pero el atletismo es un deporte en el que se ha llegado a niveles de perfección técnica y física muy grande y un récord mundial es algo único, una excepción", agrega.
La investigación, afirma el estudio, podría afectar las condiciones del entrenamiento atlético y la organización de las competencias en el futuro.
Y la consigna olímpica de "Citius, altius, fortius" (Más rápido, más alto, más fuerte) quizás ahora deberá ser reformulada con el "Sanius" (más sano).
La pregunta fundamental -dicen los autores- es ¿seguiremos viendo en el futuro que los deportes dependen de las plusmarcas mundiales?
"El atletismo vive mucho de los récords mundiales" afirma el profesor Carlos Cordente.
"Y será un verdadero problema que un espectador no tenga la esperanza de que en algún momento se podrán superar esas marcas mundiales".
No hay comentarios:
Publicar un comentario