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Terim: "Un cambio de mentalidad desató la revolución"

En el mundo del fútbol prospera un tópico aún no confirmado, según el cual los líberos suelen convertirse en los mejores entrenadores. Fatih Terim es un buen ejemplo. El seleccionador nacional de Turquía sirvió durante muchos años como principal bastión de la defensa de su país y, tras colgar las botas, se dedicó a dirigir los destinos de los suyos desde la banda. La decisión no pudo ser más acertada, como lo demuestran los abundantes éxitos que a sus 54 años acumula como técnico.

En los sueños de ese gigante dormido del fútbol que es Turquía desde hace unos años, gracias al fervor de sus seguidores y a las casi inagotables reservas de prometedores talentos, el despertar se presiente cada vez más cercano. A las órdenes de Terim, Turquía se clasificó para la Eurocopa 1996 y logró así su primera participación en la fase final de una competición importante desde su aparición en la Copa Mundial de la FIFA 1954. Este hito puso en marcha la eclosión del combinado turco, que en la Copa Mundial de la FIFA Corea/Japón 2002 hizo un brillantísimo papel y quedó tercero.

Tras subsecuentes estancias como entrenador en el Galatasaray de Estambul, el Fiorentina y el Milan, Terim retomó el mando de la selección nacional de Turquía en 2005, dimitió de su cargo en enero de 2006, pero tan sólo once días después le persuadieron para que volviera a asumir el puesto. Ahora el estratega se prepara para causar sensación con sus compatriotas en la Eurocopa de Austria y Suiza 2008. "El Emperador", como lo apodan en su patria por sus notorias dotes de liderazgo, ha conversado en exclusiva con FIFA.com.

Señor Terim, su país goza de una gran tradición futbolística. ¿Podría definir en pocas palabras lo que significa el fútbol para los entusiastas hinchas turcos?
Turquía es, desde todo punto de vista, una nación de fútbol. La actitud, el amor y la pasión por este deporte cunden entre nuestra población joven. El fútbol es algo más que entretenimiento, se ha transformado en una pasión en nuestro país. Los clubes están creciendo económicamente, y el negocio del fútbol está aumentando en la misma medida.

En Corea/Japón 2002, Turquía terminó en el tercer puesto. En estos momentos, parece que el fútbol turco está recuperando su mejor forma. El Fenerbahçe está en dieciséisavos de final de la Liga de Campeones de la UEFA, y la selección nacional ha reservado su billete para la inminente Eurocopa 2008. ¿Qué ha cambiado en el fútbol turco para regresar al camino de los éxitos?
La triunfal trayectoria internacional de Turquía empezó con la clasificación para el Campeonato Europeo de 1996. Las posibilidades que se generaron en aquel momento propiciaron la conquista del tercer podio en la Copa Mundial de la FIFA 2002. La meta de la selección nacional de Turquía es participar en todas las competiciones importantes y crear una escuela turca de fútbol. Para el fútbol turco es importante el éxito del Fenerbahçe en la Liga de Campeones, así como el de los demás clubes.

Una pregunta personal. Usted es el seleccionador nacional de su país. ¿Es el trabajo perfecto?
Es cierto que, como seleccionador nacional, tengo la responsabilidad de decidir el rumbo del fútbol turco y establecer los objetivos. Sin embargo, ser seleccionador nacional significa mucho más que eso.

En su carrera como futbolista, usted ostentó durante mucho tiempo el récord de partidos internacionales disputados. Ahora es el entrenador turco de mayor fama. ¿Qué le gusta más, ser futbolista o ser entrenador?
Lo que más me gusta es el fútbol. No importa si juego yo o si lo hacen mis jugadores. Lo que importa es hacerlo bien.

Los futbolistas turcos figuran entre los mejores de Europa en cuanto a habilidad, técnica y dominio del balón. En su opinión, ¿cómo se halla Turquía en comparación con los mejores equipos del mundo? ¿Y cuál es la diferencia que aún la separa de los mejores?
Cuando nos clasificamos para la Eurocopa 1996, se produjo un cambio de mentalidad, que para mí fue lo que desató la revolución. En aquel entonces, no había ningún futbolista turco que jugara en el extranjero. Con aquel cambio de mentalidad, enseñamos a nuestros jugadores a ganar en lugar de a intentar no perder. Aquel cambio les abrió las puertas de los clubes europeos y condujo al éxito en la Copa Mundial de la FIFA 2002.

Muchos de los principales futbolistas turcos, como los gemelos Altintop, se criaron lejos de su país de origen. ¿Nota usted alguna diferencia entre ellos y los futbolistas formados en Turquía en términos de mentalidad y calidad?
Por supuesto que hay importantes diferencias entre los jugadores que se criaron en el extranjero y los que han vivido toda su vida en Turquía. La calidad es individual y única. Se puede tratar de mejorar la calidad en cualquier parte del mundo y obtener más o menos los mismos resultados. La mentalidad, sin embargo, es muy personal, y afecta a la actuación de los jugadores según la procedencia social y el entorno.

Hablemos de la Eurocopa 2008. ¿Qué piensa de sus tres contendientes en el Grupo A: Suiza, República Checa y Portugal?
Si nos fijamos en la tabla de clasificación mundial de la FIFA, nuestros adversarios han mantenido una posición estable a lo largo de los dos últimos años. Han tenido ligeras variaciones, pero no han sufrido cambios drásticos ni realizado grandes gestas. Portugal quedó subcampeona en la Eurocopa 2004, y ocupa el octavo puesto en el ranking mundial. La República Checa fue finalista de la Eurocopa 1996, y ocupa el quinto lugar. Suiza figura en el 44º, pero tiene la ventaja de jugar en casa. Nosotros apuntamos a continuar la tendencia alcista del fútbol turco en este certamen.

¿Quiénes son para usted los favoritos del campeonato?
Creo que cualquiera de los 16 equipos participantes pueden proclamarse campeones. No creo que sea realista elegir un nombre, pero lo que sí puedo decir es que la carrera por el campeonato se decidirá en los pequeños detalles, dado que no hay grandes diferencias entre los equipos.

¿Cuáles son las metas de Turquía en la Eurocopa de la UEFA 2008?
La meta de la selección nacional turca es alcanzar el puesto más alto en todas las competiciones en las que participemos. Somos un buen equipo y tenemos jugadores muy bien dotados. Combinaremos nuestra calidad con nuestro talento y trabajaremos por llegar lo más lejos posible.

¿Quiénes son los jugadores decisivos de su actual plantilla?
Al igual que los demás equipos participantes en la Eurocopa 2008, tenemos jugadores clave. No obstante, en el fútbol actual, más que los jugadores clave importan las jugadas clave.

Para terminar, echemos una mirada al futuro. ¿Será Turquía capaz de ganar algún día la Copa Mundial? ¿Y de qué será capaz en la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010?

Hasta ahora, todos los campeones del mundo proceden de Sudamérica o de Europa. En 2010, África va a celebrar por primera vez el prestigioso certamen. Creo que los equipos africanos tienen más posibilidades que nunca de ganarlo, dado su creciente vigor. Pero queremos que sea un equipo europeo el que gane, como en la última edición.