Capitan

Donovan: La forja de un capitán
Resulta difícil de creer que Landon Donovan sólo tenga 25 años. El hombre que comparte con David Beckham gran parte del peso ofensivo en el Galaxy de Los Ángeles ha sido 97 veces internacional con Estados Unidos, ha disputado dos Copas Mundiales de la FIFA, ha ganado tres títulos de la MajorLeagueSoccer estadounidense y tres veces la Copa Oro de la CONCACAF. Asimismo, ha sido elegido dos veces mejor jugador estadounidense del año y, hace poco, encontró tiempo para batir el récord de máximo goleador en la historia de la selección de Estados Unidos.

Dicho momento histórico se produjo el pasado 19 de enero, en el minuto 48 de un amistoso ante Suecia en Los Ángeles, saldado con victoria local. El intencionado tiro penal del delantero californiano se alojó en el fondo de las mallas y mandó a mejor vida los 34 tantos de la anterior plusmarca, obra del gran Eric Wynalda.

El heredero natural de Claudio Reyna como nuevo capitán de Estados Unidos hizo un hueco para conversar con FIFA.com sobre su flamante récord, su nuevo papel dentro y fuera de la cancha y sus esperanzas con vistas al inminente reto de Sudáfrica 2010.

A muchos jugadores les gusta quitarle hierro al asunto y declarar que los récords individuales no importan. ¿Qué significa para usted batir el récord de goles con Estados Unidos?
En general no tiene tanta importancia; tenemos que concentrarnos en los partidos importantes y en ir construyendo el equipo. Pero a mí, personalmente, es algo que me enorgullece de veras, y sé que en el futuro es algo que me hará sonreír y que recordaré con gran cariño.

Después de transformar el penal y elevar su cuenta goleadora a 35, se pudo ver cómo agarraba inmediatamente el balón y lo traía hasta la línea de banda...
Simplemente quería tenerlo, quedármelo. Quiero un recuerdo tangible de ese momento que pueda guardar en mi casa. No voy a dejarlo escapar, ni venderlo ni nada (risas).

¿Ha tenido la oportunidad de hablar con Eric Wynalda, el hombre al que arrebató el récord?
De hecho, me encontré con él en un partido benéfico poco después de meter el gol, y él vino y me dijo "enhorabuena", y me estrechó la mano. De todas formas, Eric es un tipo un poco pintoresco y muy aferrado a sus ideas, y es difícil saber lo que realmente está pensando. No me sorprendería que estuviera maldiciéndome a mis espaldas (risas).

De sus 35 goles con Estados Unidos, ¿podría resaltar alguno como su favorito?
Podría haber dicho mi primer gol en la Copa Mundial, contra Polonia, pero íbamos perdiendo 3-0 en ese momento [ en la primera fase de Corea/Japón 2002], así que en realidad no pude celebrarlo como es debido. Debo decir que mi favorito es el que metí contra México en la segunda fase [ de Corea/Japón]. No creo que vaya a olvidarme de muchos de mis goles, pero estoy seguro de que jamás me olvidaré de ése. Marcar en una victoria contra México en la Copa Mundial es muy importante.

Contra Suecia lució el brazalete de capitán y, al parecer, le han impuesto un papel de líder. ¿Cómo se siente al respecto?
Está claro que mi labor ha cambiado un poco con la marcha de algunos de los veteranos como Claudio [Reyna] y Brian [McBride], y con [Bob] Bradley en el banquillo. El seleccionador espera mucho de mí y me mete mucha presión. De todas formas, me gusta; no me importa en absoluto.

Hay muchos adolescentes con talento que están llegando ahora a la selección estadounidense, como Danny Szetela, Jozy Altidore y Michael Bradley. ¿Cree que le miran como un ejemplo a seguir?
Tuvo que pasar un rato para darme cuenta de que así era, pero sí, creo que sí. Puedo acordarme de algunos de los jugadores consolidados en la selección cuando yo era muy joven e intentaba abrirme paso en el equipo, y su ejemplo significó mucho para mí. Tengo que desempeñar ese papel para estos chicos nuevos.

También da la impresión de que su posición en el campo ha cambiado un poco hasta una demarcación más retrasada, casi en la medular...
Es cierto. Bob [Bradley] me está haciendo jugar un poco más atrás. Aun así, las cosas que se esperan de mí, como ayudar a fabricar goles y hacer circular el balón, siguen siendo las mismas. No es un cambio radical.

Tras las recientes victorias contra Suiza, Sudáfrica y ahora Suecia, ¿cree que el equipo está alcanzando el momento de forma idóneo con vistas a los partidos de clasificación para la Copa Mundial de la FIFA de este verano?
Esos tres últimos resultados han sido magníficos para nosotros. No hicimos un juego muy bonito en ninguno de esos encuentros, pero tampoco tuvimos problemas a la hora de apuntarnos la victoria. Tuvimos controlados los partidos y jugamos bastante bien.
Suecia era una selección complicada como rival y no estuvimos muy sueltos contra ellos, al ser el primer partido del nuevo año. Pero los tuvimos bien controlados.

¿Y cómo ve la fase de clasificación para Sudáfrica 2010? Para empezar, Estados Unidos se enfrentará aBarbados o a Dominica en una eliminatoria a doble partido...
No me parece muy justo que tengamos que enfrentarnos a una de las selecciones supuestamente menores para acceder a la fase de grupos. Nosotros, y también México, ya hemos demostrado sobradamente nuestra categoría en las últimas campañas mundialistas y, sin embargo, todavía tenemos que pasar por este escollo realmente peliagudo.

Pero lo cierto es que Estados Unidos debería ganar...
No se puede dar por sentado. Los partidos de fútbol no siempre transcurren como te esperas, o como se prevé. Puede pasar cualquier cosa. Puede que remates contra el larguero ocho veces y que ellos jueguen el partido de su vida, y puede que te encuentres fuera antes incluso de haber empezado.

Ése es un tema interesante. ¿Cómo se plantea un encuentro que todo el mundo piensa que se debería ganar fácilmente?

Tienes que mantenerte alerta todo el rato y apremiar. Tienes que salir con la mentalidad de meter todos los goles que puedas lo antes posible. Cuanto más tiempo esté el marcador sin moverse, más aumentará la confianza del riva