Henry

Henry: "Soy humano, no un fantástico"

Lo ha dicho en francés, inglés y español: "No puedo ser el mismo que fui en el Arsenal porque no hago el mismo trabajo en el FC Barcelona", repite Thierry Henry una vez más a BBC Deportes en la sala de trofeos del Camp Nou, al día siguiente del partido de ida de semifinales de la Liga de Campeones con el Manchester United.

Con una camiseta blanca y unos jeans rotos a la altura del muslo, el delantero francés -que en ocho años junto al Arsenal marcó 174 goles- habla sobre la primera temporada que está viviendo en un Barcelona que brilla en la contienda europea y se apaga en la liga local.

Tras un largo suspiro, su primer comentario es "no lo sé". No se explica cómo es que están de terceros en la clasificación de la Liga Española y el miércoles ofrecieron un espectáculo en casa contra los diablos rojos del Old Trafford.
"Puede ser que a veces, cuando jugamos con equipos de la Champions, ellos salen un poquito más, mientras que en la liga los equipos están más a la espera y sólo hacen el contragolpe", se anima a decir... "pero en realidad no lo sé. Si tuviera la respuesta estaríamos mejor".
Sin embargo esta "mala racha" de la que hablan los jugadores azulgrana no viene de hace poco, pues la temporada pasada dejaron a los aficionados culés con las esperanzas desechas al no obtener ni un título.

El fantástico esperado
Por eso llegó Henry al Camp Nou, para revolucionar el vestuario y reforzar el llamado "tridente" formado por Ronaldinho, Samuel Eto'o y Leo Messi.
Llegó con bombos y platillos, lo llamaron el "cuarto fantástico". ¡Ahora sí que ganarían la Copa del Rey, La Liga y la de Campeones! Los números del delantero del Arsenal hablaban por sí solo.
"Cuando llegué aquí, la gente hizo mucho ruido con eso de los '4 fantásticos', pero nosotros no dijimos nada de eso", recuerda el francés que aterrizó en Barcelona en medio de la recuperación de una lesión que lo mantuvo fuera de la Premier durante los últimos meses de la temporada.
Así que la idea era tomárselo con calma; empezar los ejercicios y poco a poco ir acoplándose al ritmo de su nuevo club. "Pero Sam (Eto'o) se lesionó, después Leo (Messi) y Roni (Ronaldinho) también han tenido problemas".
Y fue así como Henry terminó de titular en los partidos españoles con una posición de extremo, completamente nueva para él, antes de lo que hubiera querido.
"Es un trabajo que ha sido nuevo para mí, en el que debes sacrificarte por el equipo. Por eso no anoto como antes. Aquí en el Barça hay un estilo diferente en el que debo mantenerme en la banda".
De hecho, en los 22 partidos que ha pisado el césped, ha anotado siete goles. Es decir, su balón ha llegado a la red cada 273 minutos.

Más que un club
Sin embargo, Henry también le deja claro a la BBC que las nuevas exigencias y sus lesiones no son los únicos factores de este lento estreno en el club azulgrana.
"Aquí tienes que entender que Barcelona no es sólo un club. Tienes que entender el catalanismo. Donde hay un sentimiento de nación y donde el FC Barcelona es como si fuera la selección nacional de Cataluña. Así es como es y el público espera mucho de ti".
Con ese público culé exigente, que no acepta medias tintas, Henry ofrece respuestas equilibradas. No considera que lo hayan "aceptado" o "rechazado". "Es como en todas partes. Cuando empecé en el Arsenal fue igual", prefiere decir.
Esa dureza de la afición barcelonista no es sólo hacia él, sino para con todas sus "estrellas"... y Henry lo sabe. Sabe que mientras las cosas salen bien, los jugadores tienen carta blanca para comportarse de la manera que más les parezca.
"Si salen hasta tarde, si llegan tarde a los entrenamientos -¡y yo no estoy diciendo que lo haga!- si respondes mal a alguien... nada de eso importa porque estás ganando. Pero en el momento en que no obtienes los resultados esperados, la afición no acepta esas actitudes".

Partidazo sin goles
Para este francés apasionado por el fútbol, que sigue cada partido de la Premier por televisión y que tras una sonrisa confiesa que "podría hablar todo el día de fútbol", el juego no sólo se debería juzgar por las estadísticas de goles.
"Ayer (23 de abril), por ejemplo, considero que fue un partido genial... otro tipo de partido, pero nos fue bien aunque no hubo goles", explica Henry, quien todavía no se acostumbra a que su "casa" ya no esté en Londres.
El mismo Henry al que le brillan los ojos cuando habla sobre el recibimiento que cree tendrá este martes en el Old Trafford del Manchester en el partido de vuelta de la semifinal de la Liga de Campeones.
"Creo que la afición me recibirá de la misma forma que lo ha hecho siempre", contesta riéndose. "Yo soy un aficionado del Arsenal, pero tienes que respetar al Manchester United por lo que representa y porque respetas el fútbol. Todo el mundo lo siente así. Aquí en el vestuario también. Por eso jugamos como jugamos anoche".

Old Trafford, escenario perfecto
Ese esperado regreso de Henry -no a cualquier estadio inglés- al "Teatro de los sueños", podría ser el escenario perfecto para que con un gol suyo los azulgranas se ganen el boleto final a Moscú.
"Ese estadio es el escenario ideal para cualquiera. Siempre estará preparado para que (Cristiano) Ronaldo gane, para que (Carlos) Tévez anote o para que cualquier otra persona se luzca. Es el estadio, es la afición... es el respeto que sientes por ese club".
"Podría ser el final perfecto para que el Manchester clasifique. Pero en la vida real, ese tipo de finales no siempre suceden", continúa Henry con su voz suave.
Apenas si se le nota el acento francés cuando habla sobre el partido que este fin de semana le podría dar el título de la Premier a los diablos rojos en un clásico contra el Chelsea.
¿Podría beneficiar que el United tenga un encuentro tan importante un par de días antes de la Champions? "Sí y no. Si ellos ganan el fin de semana se quedan con la liga... cuando ganas te salen alas".

Prioridad Champions
A día de hoy, el título más factible para Frank Rijkaard es el continental. La Copa del Rey la perdieron contra el Valencia y casi debe ocurrir un milagro para que se queden con el título de la Liga Española.
Por eso Henry está de acuerdo con BBC Deportes en que la clasificación de la Champions sea la prioridad para el club. Aunque aclara que "hay que creer y tener esperanzas".
"Podemos hacer puntos (en la liga), aunque en este momento parece más fácil, mucho más fácil, ganar la Champions que la Liga... yo no voy a mentir. Pero hay que seguir luchando, porque es mejor acabar la temporada de segundos que de terceros para no tener que volver antes y jugar el torneo previo a la Liga de Campeones".
Ese tercer lugar en la liga que tantos titulares en los medios locales han salido, para Henry, no significa que el proyecto de Rijkaard esté en declive y mucho menos que sea necesaria una reestructuración en el Barcelona.
"El Barça ha ganado así y a veces ha perdido así. Nosotros tuvimos el mismo problema en el Arsenal, porque nuestro juego era de toque. Cuando ganábamos la gente decía '¡oye, increíble!' Pero cuando no se gana, entonces dicen que lo que sucedes es que juegas demasiado con el balón".

"Buenos jugadores"
Henry tampoco cree que la poca intensidad en los partidos se deba a un exceso de estrellas en el vestuario azulgrana. Calificativo que -por cierto- le resulta repulsivo al francés.
"Tu le llamas 'estrellas' yo le llamo 'buenos jugadores', porque no me gusta esa palabra. El Manchester tiene buenos jugadores y está muy bien. Con Francia hemos ganado muchas cosas con buenos jugadores... se puede ganar con buenos jugadores y se puede perder con buenos jugadores. También se puede ganar con jugadores que la gente piensa que no son tan buenos. Es así".
Pero también se gana con una afición que apoye a su equipo contra viento y marea. Una afición que pocas veces se ve en el Camp Nou, donde los culés son los más críticos con sus jugadores y no dudan en sacar un pañuelo blanco o pitar si no están satisfechos con el desempeño de la plantilla.
"Ya sabemos que es así. Cuando no se juega bien, la afición no está contenta... Pero ayer ¡Pfff! ¡Fue increíble! Aquello se parecía al campo del Liverpool", comenta con los ojos muy abiertos de impresión a BBC Deportes sobre la actitud exultante que en el partido del 23 de abril acompañó con vítores a su equipo de principio a fin.

Como la gente
Esa afición que en la Liga quizás sólo se vea en un clásico Barcelona-Real Madrid y que a Henry le encantaría que estuviera en cada contienda de la temporada.
"No es que me gustaría es que... sí... es mucho mejor. Es mucho mejor jugar en un ambiente así".
Esa afición que también es implacable ante los errores y que a veces pecan de catalogar a sus jugadores como superhombres. "Desde que llegué lo dije. Yo soy un humano con problemas que cuando estoy bien, estoy bien y cuando no estoy bien, no estoy bien. Como la gente... ¡como todos!".
Pero es un humano que juega en uno de los mejores clubes del mundo y que al que le exigen ganar títulos y más títulos.
"Lo sé. He hecho cosas en mi carrera que hace que la gente espera mucho de mí. Pero lo he dicho desde que empecé a jugar fútbol: soy un jugador que a veces juega bien y a veces juega mal. 'Crack', 'Fantástico', no", aclara el delantero francés que salió de Inglaterra como un ídolo y que en tierras catalanas tiene que convencer a su afición de que vale.
Aun así, Henry está feliz en Barcelona. No está contento con los resultados de la temporada, pero está feliz en el Camp Nou.
Sin embargo, espera volver a vivir algún día en Inglaterra. ¿Y a jugar en la Premier? "Por ahora tengo un contrato de tres años con el FC Barcelona", espera unos segundos y se pregunta, "¿regresar a donde? Sólo hay un equipo en mi corazón... me tomó tiempo entender lo que significaba (el Arsenal) y ahora, de hecho, soy un aficionado más".