https://www.facebook.com/wilber.carrion.1 - Twitter: @wilbercarrion  
  Su apoyo es bienvenido, cuenta: BBVA Continental- 0011 0175 0200256843  

lunes, 3 de noviembre de 2008

Fórmula 1

Glock: "No he regalado el título a Hamilton"

El adelantamiento del británico al alemán de Toyota decidió el Mundial

El piloto alemán Timo Glock (Toyota) asegura que el británico Lewis Hamilton (McLaren-Mercedes) conquistó el título mundial de Fórmula 1 por sus éxitos a lo largo de toda la temporada y no porque él hiciera ayer una mala elección de neumáticos para las últimas vueltas del Gran Premio de Brasil. Glock mantuvo los neumáticos de seco para las últimas vueltas de la carrera, que se disputaron bajo una fina lluvia, y aunque no perdió mucho tiempo en los primeros minutos, su última vuelta fue pésima lo que permitió a Hamilton adelantarle en los últimos metros y acabar la carrera quinto y llevarse el título.

"Fue una carrera dura. Intenté dar lo mejor para conseguir puntuar para Toyota. A seis vueltas para el final, pregunté por las condiciones de mis neumáticos y las meteorológicas y me decía todo el tiempo ''Voy a aguantar una vuelta más''. Al final aguanté toda la carrera", confesó en declaraciones a ''Radio Five Live''. El alemán sabía que llegaba muy justo a la última vuelta. "Sabía que me podía costar el ''top-cinco'' y al final, ha decidido el título mundial", aseguró un Glock que con su sexta plaza impidió a Felipe Massa (Ferrari), vencedor de la carrera, ser campeón del mundo.

De todos modos, Glock considera que no ha regalado el título a Hamilton. "No he regalado el título a Lewis, ellos han trabajado todo el año para ganar, igual que Felipe. Los dos han hecho un gran trabajo todo el año y se ha decidido en un final dramático", apuntó. Por último, considera que fue un final al gusto de los aficionados. "Creo que esto es lo que quieren ver los fans, tal vez no los brasileños, que no creo que nunca vuelvan a apoyarme, pero yo hago todo lo que puedo para lograr lo mejor para mí", concluyó.

El protagonista involuntario
Glock afirma que hizo lo que pudo para que Hamilton no le superara

Timo Glock, un alemán de 26 años, a los mandos del Toyota con el número 12, se convirtió en el protagonista involuntario del melodramático último Gran Premio de la temporada. La escudería Toyota se arriesgó y decidió que Glock intentara concluir con los neumáticos de seco a pesar de que la lluvia empezó a caer de nuevo en las últimas cinco vueltas de la carrera. Sus principales rivales decidieron entrar en boxes y cambiar neumáticos. Eso le permitió encaramarse al cuarto puesto. Pero poco después, el asfalto se convirtió en una pista de patinaje para su Toyota. Era imposible resistir con las gomas lisas. "Luché tanto como pude pero era incapaz de mantener el coche sobre el asfalto y, justo en la última vuelta, perdí dos posiciones", argumentó el piloto. No era ajeno a que ese episodio cambió por completo el panorama, hundió a Felipe Massa y encumbró a Lewis Hamilton.

Glock, que concluyó el campeonato en el décimo puesto con 25 puntos, sólo seis menos que su veterano compañero de escudería Jarno Trulli, se mostró satisfecho tras su primera capaña completa en la fórmula 1. Dio todo lo que pudo en la última carrera de Interlagos y concluyó en el sexto puesto de la prueba. "Es un buen resultado para mí. He logrado mi objetivo, sumar más de 20 puntos en el campeonato y mejorar el coche", dijo el piloto que debutó en la fórmula 1 hace ya cuatro años en Jordan. Pero fue de manera fugaz. Era piloto de pruebas de la escudería irlandesa, pero un enfrentamiento entre el piloto titular Giorgio Pantani y los responsables de la escudería, le permitieron competir en el Gran Premio de Canadá. Concluyó en el puesto 11 pero la descalificación de los Toyota y los Williams por un problema con los frenos, le dieron el séptimo puesto y le permitieron sumar sus dos primeros puntos.

Después, Glock tuvo que ganarse el puesto nuevamente en otras categorías como la Champ Car, en Estados Unidos, y en la GP2. El año pasado ganó el título mientras compaginaba las carreras con su trabajo de piloto probador para BMW. Al fin, esta temporada, Toyota lo fichó ya como piloto oficial junto a Jarno Trulli. Alcanzó su mejor resultado en el Gran Premio de Hungría, donde concluyó en el segundo puesto, sólo superado por el finlandés Heikki Kovalainen. Sólo una carrera antes, en Hockenheim, había sufrido un tremendo accidente al estrellarse con su Toyota a más de 200 kilómetros por hora directamente contra el muro. Demostró entonces su valentía y su capacidad de recuperación, pero lo que no podía ni siquiera sospechar es que iba a acabar convirtiéndose en el juez involuntario del campeonato y además, en una dramática última vuelta.

Final de cine para el príncipe Hamilton
El británico se toma la revancha ante Ferrari y se convierte en el campeón más joven de la historia en la F-1

La fórmula 1 se reivindicó ayer como un deporte espectacular y mediático por excelencia para suerte de los dueños del negocio con un final de película en la última carrera en el circuito brasileño de Interlagos. Acabado el campeonato, el desenlace resultó tan vertiginoso e incierto que en el taller de Ferrari celebraban el título de Felipe Massa sin reparar en que el nuevo rey era Lewis Hamilton. La escudería italiana no se ha dado por enterada durante la temporada. Tanto Massa como Kimi Raikkonen han sido demasiado irregulares y el equipo ha cometido errores de bulto pese a que sólo tenían al británico como rival. De la misma manera que la corona ganada el año pasado en el último suspiro por Raikkonen castigó la incompetencia de McLaren, el triunfo ayer de Hamilton penalizó los despropósitos de Ferrari. A sus 23 años y 299 días, Hamilton se tomó la revancha del ejercicio pasado y se proclamó el campeón más joven de la historia, récord que estaba en poder de Fernando Alonso, definitivamente el mejor piloto en el último tramo del curso.

El podio de Interlagos fue tan fotogénico como apasionante resultaron las últimas tres vueltas. Alonso posó con Massa y Raikkonen en un momento en que se especula de nuevo sobre el posible fichaje del español por Ferrari. Lloraba Massa de dolor por un triunfo estéril mientras Hamilton brincaba feliz con su familia por un título que no alcanzó hasta el último giro después de 18 grandes premios.

Derrotado el año pasado de manera sorprendente por su desmesurada agresividad, el británico corrió ayer con la calculadora, siempre al límite de los puestos que le daban el título, cosa peligrosa cuando las circunstancias meteorológicas son tan cambiantes como ayer en Brasil. Ocurrió que Sebastian Vettel adelantó a Hamilton en la penúltima vuelta, le relegó al sexto puesto y le dejó sin título hasta que el británico superó a Timo Glock -el alemán no había parado para cambiar neumáticos cuando volvió a caer la lluvia- a falta de cinco curvas para la meta y recuperó la quinta plaza que le daba matemáticamente el campeonato por un punto y pese al triunfo ayer de Massa.

Un final dramático para una temporada cambiante y que a fin de cuentas dejó a cada piloto en el puesto que por méritos le correspondía. Aunque puede que completara la peor carrera del año, nadie discutió el triunfo final de Lewis Hamilton. Del mismo escenario donde fue tomado por un villano la temporada pasada, salió ayer saludado como un héroe. Que el británico ganara el título era una cuestión de tiempo desde que debutó en la fórmula 1. Le bastaron 35 grandes premios y dos temporadas.

No hay comentarios: