Los clubes contra los Juegos
Los equipos se amparan en la normativa de la FIFA para evitar ceder a sus futbolistas
El eterno desencuentro entre el movimiento olímpico y el fútbol ya tiene escrito otro capítulo. Después de amenazar pero finalmente transigir a regañadientes en pasadas ediciones, los clubes, amparándose en el reglamento de la FIFA, se han plantado de cara a Pekín 2008. Los inminentes Juegos Olímpicos no contarán con las principales figuras mayores de 23 años de los clubes europeos.
La FIFA ha tenido que cortar por lo sano ante la creciente polémica y ayer realizó una aclaración de su reglamento. Sus estatutos no dejan lugar a la duda. Los clubes no están obligados a ceder a los tres jugadores mayores de 23 años que cada selección puede llamar, pero les solicita que, "por solidaridad con el movimiento olímpico", les permitan acudir a los Juegos. Con respecto a los menores de 23 años, los estatutos obligan a los equipos a prestar a sus futbolistas a los combinados nacionales.
Esta declaración no ha sido suficiente para frenar el levantamiento que se ha producido en estos Juegos con respecto a los mayores de 23. El pionero fue el Deportivo. Antes de que el seleccionador, Sergio Batista, diera la lista, el club comunicó que Coloccini no iría con Argentina. El club considera que "todo eso del movimiento olímpico es bonito, pero injusto, porque no hay una norma global". La razón para no prestar al futbolista es que "necesita descanso y es imprescindible". Le secundaron el Real Madrid con Heinze, el Inter con Burdisso, el Milan con Kaká, el Bayern con Demichelis y Lucio, y el Barcelona con Ronaldinho, quien, sin embargo, asegura que estará con Brasil. Por el contrario, Eto'o ha sido convocado por Camerún y el Barcelona no se ha opuesto. Tampoco el Madrid con el brasileño Robinho, el Liverpool con el argentino Mascherano y el Chelsea con el marfileño Drogba.
Los clubes también buscan vericuetos legales para retener a los menores de 23 años. El Barcelona tiene a todo a su aparato jurídico trabajando para evitar que Leo Messi, de 21 años, acuda a Pekín con Argentina. Desde el club defienden la tesis de que los Juegos "no pertenecen al calendario FIFA", por lo que "no tienen ninguna obligación de cederlo". El club confirmó ayer que prepara un documento para enviar a la FIFA e intentar retener a su estrella. El Werder Bremen busca lo mismo con el brasileño Diego.
Los equipos se amparan en la normativa de la FIFA para evitar ceder a sus futbolistas
El eterno desencuentro entre el movimiento olímpico y el fútbol ya tiene escrito otro capítulo. Después de amenazar pero finalmente transigir a regañadientes en pasadas ediciones, los clubes, amparándose en el reglamento de la FIFA, se han plantado de cara a Pekín 2008. Los inminentes Juegos Olímpicos no contarán con las principales figuras mayores de 23 años de los clubes europeos.
La FIFA ha tenido que cortar por lo sano ante la creciente polémica y ayer realizó una aclaración de su reglamento. Sus estatutos no dejan lugar a la duda. Los clubes no están obligados a ceder a los tres jugadores mayores de 23 años que cada selección puede llamar, pero les solicita que, "por solidaridad con el movimiento olímpico", les permitan acudir a los Juegos. Con respecto a los menores de 23 años, los estatutos obligan a los equipos a prestar a sus futbolistas a los combinados nacionales.
Esta declaración no ha sido suficiente para frenar el levantamiento que se ha producido en estos Juegos con respecto a los mayores de 23. El pionero fue el Deportivo. Antes de que el seleccionador, Sergio Batista, diera la lista, el club comunicó que Coloccini no iría con Argentina. El club considera que "todo eso del movimiento olímpico es bonito, pero injusto, porque no hay una norma global". La razón para no prestar al futbolista es que "necesita descanso y es imprescindible". Le secundaron el Real Madrid con Heinze, el Inter con Burdisso, el Milan con Kaká, el Bayern con Demichelis y Lucio, y el Barcelona con Ronaldinho, quien, sin embargo, asegura que estará con Brasil. Por el contrario, Eto'o ha sido convocado por Camerún y el Barcelona no se ha opuesto. Tampoco el Madrid con el brasileño Robinho, el Liverpool con el argentino Mascherano y el Chelsea con el marfileño Drogba.
Los clubes también buscan vericuetos legales para retener a los menores de 23 años. El Barcelona tiene a todo a su aparato jurídico trabajando para evitar que Leo Messi, de 21 años, acuda a Pekín con Argentina. Desde el club defienden la tesis de que los Juegos "no pertenecen al calendario FIFA", por lo que "no tienen ninguna obligación de cederlo". El club confirmó ayer que prepara un documento para enviar a la FIFA e intentar retener a su estrella. El Werder Bremen busca lo mismo con el brasileño Diego.
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