¿Quién triunfa en una
entrevista?
FORBES- 9 de Agosto de 2016
En una entrevista de trabajo, una
gran parte de la decisión para que te den o no el empleo se basa en 4
parámetros subjetivos. Tómalos en cuenta.
Algo que pocos entrevistados
saben es que un porcentaje muy alto de la decisión sobre un candidato a un
puesto de trabajo se toma en los primeros segundos de interacción. Esta
decisión, en ocasiones subconsciente, tiene que ver con la biología, la imagen,
el lenguaje no verbal y el estado de ánimo.
Vamos a partir de la premisa de
que el grupo de personas entrevistadas para un puesto de trabajo cumple con los
requisitos mínimos para la posición: años de experiencia, idiomas, carrera
universitaria, conocimiento de la función y edad. ¿Qué lleva al entrevistador a
decidirse por uno u otro candidato?
Una vez que se cumple con estos
requisitos mínimos, en cualquier proceso existirán factores de decisión
objetivos: entrevistas en profundidad, dinámicas de grupo, exámenes
psicológicos, etc., pero una gran parte de la decisión se basará en cuatro
parámetros subjetivos:
1. Biología: Existe una clara
relación entre los rasgos físicos y la retribución económica. Varios ejemplos:
— Científicos de la Universidad
de Duke estudiaron los registros vocales de casi 800 directores generales en
Estados Unidos para descubrir que aquellos con voces más graves dirigen
empresas más grandes y tienen mayores salarios.
— Un sondeo de 2005 en Estados
Unidos reveló que los consejeros delegados de las principales empresas medían
casi 7 cm más que la media del país.
— La Universidad de Exeter en
Reino Unido estudió a más de 100,000 personas para llegar a la conclusión de
que cada centímetro de altura añadía, de media, 200 libras al salario anual de
un británico.
— Un estudio de Wharton descubrió
que los calvos tienen un aspecto más dominante y, por tanto, más posibilidades
de obtener mejores puestos en una organización.
— Un estudio publicado en el
Journal of Marketing and Communication destacaba que los consumidores confían
más en los hombres con barba que en los afeitados.
— Un análisis de la Universidad
de Nueva York relacionó peso y salario al ligar un aumento del 1% en la masa
corporal con un descenso del 0.6% en los ingresos.
— Un estudio de Harvard demostró
que el percentil de los más guapos ganan aproximadamente un 15% que el
percentil de los más feos ante igualdad de habilidades.
— La Universidad de Queensland
concluyó que las rubias ganan un 7% más que el resto.
2. Imagen: La vestimenta, higiene
y cuidado personal también afectan nuestras ganancias y posibilidades de
triunfar a la hora de un aumento o un ascenso. Un estudio que realizó la
Universidad de Chicago durante 13 años con 14,000 personas, concluyó que quienes
se ocupan de su imagen ganan un 20% más de sueldo.
3. Lenguaje no verbal: Según los
expertos, más de 65% del lenguaje usado entre dos o más personas se realiza a
través de gestos y movimientos, y el interlocutor es capaz de detectar en
décimas de segundo los mensajes no verbales. Postura, mirada, rapidez o
lentitud de movimientos, fuerza en el saludo o modo de caminar dicen mucho
sobre un candidato y disminuyen o incrementan las posibilidades de conseguir un
trabajo.
4. Estado de ánimo: Hay una frase
de Albert Schweitzer que dice: “El éxito no es la clave de la felicidad. La
felicidad es la clave del éxito.” Un empleado optimista, feliz y motivado rinde
más y es más exitoso. Por lo tanto, se tiende a priorizar candidatos con
estados de ánimo positivos.
En ninguna descripción de puesto
aparecerán estos factores ni habrá empresa alguna que reconozca tenerlos en
cuenta. Y seguramente así sea. Pero de manera consciente o inconsciente, estos
parámetros influyen en decisiones relacionadas con una contratación, un aumento
de sueldo o un incremento de responsabilidad.
En resumen, a igualdad de
condiciones, cualquier persona, de manera premeditada o no, elegirá asociarse
en más ocasiones y en mejores condiciones con los altos, guapos, delgados, con
voz grave, buena imagen, posturas erguidas, confianza al saludar y al caminar,
y con un estado de ánimo optimista mostrando motivación y felicidad.
Carlos Lanzón-Socio de AMROP,
firma internacional de Executive Search y consultoría estratégica en talento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario