educación

 ¿Cómo cambiar la peor profesión del mundo?

América Economía - viernes, 13 de noviembre de 2015

Hoy en día existe una gran distancia entre lo que se enseña en las escuelas y las habilidades reales que se necesitan en el campo laboral, por ello, el objetivo de la educación debe ser construir hoy alumnos que tengan mejores competencias y habilidades para el mercado laboral de mañana a través de distintos enfoques…

Maleducados

Hace algún tiempo se realizó una campaña llamada El experimento sobre horarios laborales que te va a sorprender #lohacesypunto.

En él varias personas contestan a un interlocutor que se comunica con ellos a través de una pantalla. El juego consiste en adivinar qué profesión tiene esa persona con la conversan.

Las pistas son hechos como una jornada laboral de 8 horas diarias y otras 3 en casa, que el trabajo “hay que hacerlo y punto”, no poder negarse, porque “ya sabes lo que toca”, humillaciones delante de los compañeros y trabajo incluso los fines de semana.

Con pistas así, ¿ya sabes de qué profesión se trata?

Sí, estudiantes de educación básica. Ellos tienen la peor profesión del mundo.

De acuerdo con Eva Bailén, la creadora de la campaña "Por la racionalización de los deberes en el sistema educativo español", lanzada en change.org, es serio el problema del sistema educativo (que sigue parámetros similares en Occidente): "(Con las) jornadas tan largas, cuando (los niños) llegan a la adolescencia, están hartos de deberes y del sistema educativo"

Por ello es preciso cambiar el esquema, pues cantidad no significa calidad, ya que según el ranking del informe PISA 2012, Finlandia sobresale en educación a pesar de ser uno de los países de la OCDE cuyos alumnos dedican menos horas a los deberes.

Pero, ¿cómo lograr cambiar el enfoque? En México existe una nueva propuesta y se llama Knotion.

Nuevas estrategias

Knotion persigue el uso de la tecnología de manera eficaz, el desarrollo de las habilidades y destrezas, el cuidado del medio ambiente, así como el respeto y aprecio por las diferentes culturas en el mundo para que los alumnos que aprenden bajo su metodología construyan su propio conocimiento.

El programa, cien por ciento mexicano, propone la tecnología como medio para la entrega de contenidos en un formato 80% digital y 20% otros recursos, además, contempla la implementación de una red en el colegio para garantizar el internet en sus instalaciones, así como el uso del iPad 1 a 1 para alumnos y maestros.

"El panorama educativo actual está lleno de retos y de posibilidades de mejora. El mundo ha cambiado, pero los modelos educativos no lo han hecho a la velocidad necesaria... Nos tenemos que centrar mucho más en el aprendizaje y no en la enseñanza; con esto, se logrará proveer a los estudiantes de herramientas que les permitan desarrollar sus habilidades y ayudarlos a pensar de manera compleja, global y eficaz”, comentó Carlos Niembro, COO de de Knotion.

Y es que ante el gran abismo entre lo que el niño sabe y lo que las empresas hoy en día piden que sepan, es claro que uno de los puntos débiles de la educación de hoy es el desarrollo del pensamiento crítico y el trabajo colaborativo, de acuerdo con Knotion.

"Los retos a los que los niños se enfrentan y el mundo globalizado están exigiendo un cambio… sabemos que la educación es demasiado técnica, que los contenidos de cierta profesión son tan específicos que se pueden volver rápidamente obsoletos. Muchas de las profesiones que nuestros alumnos desempeñarán aún no existen, por lo que ¿cómo puedes preparar a un alumno para un futuro incierto?”, apuntó el directivo.

De acuerdo con Knotion, la mejora de la calidad educativa debe de centrarse en el alumno, en sus intereses y motivaciones, por ello su meta es crear niños innovadores, colaborativos, solucionadores, tecnológicos y asertivos.

Para lograrlo, su metodología comprende un modelo que ellos llaman IMPACT((Identify, Mindshake, Prototype, Act), el cual contempla cuatro fases que se organizan alrededor de un problema global.

"Estos retos transdisciplinarios se desarrollan alrededor de un problema global en el cual a través de un periodo de cuatro semanas, los estudiantes adquieren los contenidos de las asignaturas, tienen la oportunidad de crear una solución integral al problema global y conocer cómo afecta la misma situación al mundo entero. Así, formamos ciudadanos globales, integrales y conscientes de la importancia del cuidado de su entorno… Más que modificar el modelo educativo, queremos modificar el aprendizaje, cambiar la forma en que el alumno aprende", destacó Niembro.