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Un hacker tras las campañas electorales sucias en AL

 El Universal - viernes, 1 de abril de 2016

Que la gente crea todo lo que Internet dice es el principal factor que Andrés Sepúlveda utiliza como ventaja para sus trabajos en la operación política moderna.

El hacker, amo de las artes oscuras digitales, revela los detalles de las campañas electorales sucias en América Latina en las que él ha estado detrás; entre algunas de ellas, el último proceso electoral en México.

Bajo la dirección de Juan José Rendón -aunque éste lo niega-, Sepúlveda ha hecho cuanto puede mediante trabajos de hackeo para atacar, investigar a la oposición, y buscar formas de suprimir la participación de un enemigo político, relata por primera vez en una entrevista con Bloomberg.

Entre sus tareas, según cuenta, se encuentra el espionaje, robo de datos y falsificación mediante la web en las campañas presidenciales en América Latina. Su equipo ha trabajado en las elecciones presidenciales en Nicaragua, Panamá, Honduras, El Salvador, Colombia, México, Costa Rica, Guatemala y Venezuela.

En 2012 en México, en parte, fue él quien logró regresar al Partido Revolucionario Institucional (PRI) al poder.

“Cuando Peña Nieto ganó, Sepúlveda comenzó a destruir pruebas. Perforó unidades flash, discos duros, y teléfonos celulares, frió circuitos en el microondas o los rompió a pedazos con un martillo (…). Él estaba desmantelando lo que dice "era la historia secreta de una de las campañas más sucias de América Latina en los últimos tiempos"”, se relata en la entrevista con Bloomberg.

Su trabajo, muy bien remunerado, según cuenta, siempre estuvo bajo las órdenes de Rendón, el estratega político en campañas presidenciales como las del mexicano Peña Nieto o el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos. Nunca coincidieron en reuniones o encuentros físicos, su contacto era por mensajes, por e-mail, mediante el uso de lenguaje codificado. A "acariciar", explica, se le daba la intención de atacar; a "escuchar música" significaba interceptar llamadas telefónicas de un objetivo.

Su operación era metódica, su labor: “ manipular el debate público”, era tan fácil como mover piezas en un tablero de ajedrez o, como él dice.

 Para las elecciones mexicanas, los servicios de Sepúlveda fueron requeridos para la marcar la dirección política de este país. En aquel tiempo cuando se disputaban la Presidencia el gobernante Partido Acción Nacional con Josefina Vázquez Mota como nominada, el Partido de la Revolución Democrática con Andrés Manuel López Obrador, ex alcalde de la Ciudad de México y el PRI con Enrique Peña Nieto, Rendón y Sepúlveda marcaron como objetivo primordial la campaña del perredista, a quien veían como el oponente real del actual mandatario.

En su historia, relatada a Bloomberg, el hacker relata cómo interfirió en las elecciones.

El equipo de Sepúlveda instaló software malicioso en los routers en la sede del candidato del PRD, lo que le permitió acceder a los móviles y los ordenadores de cualquier persona que utilice la red, incluyendo el candidato. Él tomó medidas similares en contra del PAN Vázquez Mota”, se explica.

El trabajo fue sencillo y el dinero no era problema, explica al revelar la inversión de 50 mil dólares en un software ruso de gama alta para intervenir teléfonos de diferentes sistemas operativos. Su labor también incluyó la creación de ejército más grande de 30 mil robots de Twitter, así como post automáticos que podrían crear tendencias.

En cuanto a la campaña del candidato de las izquerdas de México, el equipo de Sepúlveda dio un golpe al deshabilitar durante meses el sitio web personal de Luis Costa Bonino, consultor y encargado de la campaña política del tabasqueño.

En este entramado, el hacker dice que redirigió a los periodistas a un sitio clonado donde se hicieron públicos textos entre los que Bonino se plantea preguntas sobre si sus raíces uruguayas violaban las restricciones de México a los extranjeros en campañas electorales. El consultor amabandonó la campaña a los pocos días, se explica.

Actualmente, Sepúlveda está purgando 10 años de prisión en Colombia por cargos que incluyen el uso de software malicioso, delinquir, violación de los datos personales, y espionaje, relacionados con las elecciones presidenciales de ese país en 2014. Fue capturado el 6 de mayo de ese mismo año en su oficina en Bogotá.

De acuerdo con Bloomberg, un portavoz del PRI dijo que el partido no tiene conocimiento de que Rendón trabajara para Peña Nieto o cualquier otra campaña del PRI.