¿Cómo revitalizar a las lenguas indígenas?
Deutsche Welle - viernes, 30 de enero de
2015
Al morir una lengua indígena, muere todo un
legado cultural con ella. Muchas lenguas indígenas se encuentran en serio
peligro de extinguirse completamente. Procesos de revitalización lingüística
son necesarios.
Frauke Sachse, profesora del Instituto de
Culturas Precolombinas y Etnología en Bonn, Alemania, tuvo la oportunidad de
trabajar en Guatemala con los últimos hablantes de la lengua xinka, que se
hablaba en el sur oeste del país. Lamentablemente, hoy en día, la lengua se
encuentra extinta. Similares caminos parecen estar cercanos a la vista para
otras lenguas indígenas en serio peligro de extinción, en toda América Latina.
Hablantes de entre 80 y 90 años fueron los
últimos testigos de la lengua xinka. Trabajar con ellos fue lo que impulsó a
Sachse a investigar más sobre las lenguas en peligro de desaparecer y cuáles
eran los principales factores por los que las personas perdían su idioma o
decidían pasarlo o no de generación en generación.
A pesar de la muerte del xinka se han llevado a
cabo trabajos de revitalización de esta lengua, explica Sachse. Un estudiante
guatemalteco produjo documentos en castellano que explican la formación de
verbos, sustantivos, plurales, etc., en xinka para así tratar de revitalizarla
con el apoyo gubernamental. Sachse comenta que, lamentablemente, a pesar de
estos procesos el xinka nunca podrá llegar a tener un estatus de lengua viva,
sin embargo, la revitalización de la lengua resulta importante en procesos de
identidad, nos cuenta la docente.
¿Por qué mueren las lenguas?
Susanne Mohr, profesora de Sociolingüística de
la Universidad de Bonn, y Sachse, coinciden en factores físicos,
socio-políticos, así como socio-económicos en la pérdida de las lenguas
indígenas. Entre los físicos se incluyen epidemias, enfermedades o catástrofes
naturales. Entre los socio-políticos están muy presentes guerras civiles,
colonizaciones, represión y opresión política. Períodos cuando los gobiernos no
han permitido a los pueblos indígenas el uso de sus lenguas. En cuanto a los
factores socio-económicos, Sachse comenta que, en muchas ocasiones, resultan
ser los padres quienes no quieren que sus hijos hablen la lengua indígena de su
comunidad por razones de discriminación o prestigio. “Ellos quieren evitar que
sus hijos experimenten los que ellos han vivido”, añade.
A su vez, Mohr hace referencia hacia las
actitudes lingüísticas de los nativo-hablantes. Es decir, ellos puedes
presentar actitudes negativas hacia su propia lengua y cambiarla por el idioma
dominante del país y así, integrarse en la sociedad dominante y abandonar su
estilo de vida.
“Si la gente pierde su idioma, pierde mucho más
que eso, se pierden conceptos religiosos, costumbres, historias”, señala
Sachse.
¿Cómo se las puede revitalizar?
Lo más importante sería crear actitudes
lingüísticas positivas en las sociedades hacia estas lenguas, impulsar
proyectos de documentación de estas lenguas y, sobre todo, que se las enseñe en
las escuelas, explican Sachse y Mohr. Estos factores resultarían cruciales en
procesos de mantenimiento de las lenguas indígenas y revitalización; sin
embargo, éstas representan mayormente decisiones políticas.
Igualmente, es crucial crear espacios en los
que las lenguas indígenas puedan sobrevivir. Por ejemplo, utilizar los medios
de comunicación para que den un impulso y una importancia real a estas lenguas.
Sachse hace referencia a la existencia de páginas de Facebook en maya-quiche o
hip hop en quechua. Es decir, los jóvenes ya utilizan estos espacios para usar
su lengua en busca de un proceso de identidad, y también, con el objetivo de
distinguirse de la generación de sus padres.
“La gente sí usa las lenguas indígenas, al
mismo tiempo la globalización les permite comunicarse en su idioma. Hay
esperanza, pero depende del país, la situación política, etc.”, comenta Sachse.
De igual forma, es necesario promover seminarios sobre estas lenguas que
impulsen el interés de todas las partes, así como crear centros que protejan y
den apoyo a las lenguas en peligro, explica Mohr.
A su vez, dentro de las comunidades indígenas,
es importante que los padres hablen con sus hijos en sus lenguas nativas. Esto
contribuirá a que la lengua se mantenga, y a su vez, que se la trasmita de
generación en generación, coinciden las docentes.
¿Es importante el rol de los gobiernos en
procesos de revitalización lingüística?
“Sin los gobiernos no se puede hacer nada”,
indica Sachse. Los gobiernos deberían ofrecer recursos y apoyar procesos de
oficialización de las lenguas indígenas existentes en sus países. “Procesos
como en Bolivia donde el quechua se ha oficializado contribuyen mucho”, nos
cuenta.
En el contexto escolar, hay pocos países en los
que se puede aprender a leer y a escribir en una lengua indígena. Mayormente se
aprende el español y los niños no aprenden en la escuela su lengua materna.
Sachse nos cuenta que México y Guatemala cuentan ya con proyectos de escuelas
bilingües que enseñan a leer y a escribir a los niños en sus idiomas maternos,
para después, aprender el castellano.
Contribución de estudiantes alemanes
Todos los estudiantes, durante sus estudios,
deben aprender una lengua indígena, afirma Sachse. En el Instituto de Culturas
Precolombinas y Etnología se enseña actualmente náhuatl, quechua (ayacuchano),
maya yucateco y maya quiché. Los cursos duran por lo menos un año.
Sachse nos cuenta que es importante que gente
de otros países también se interese en aprender estas lenguas, dado que si
hubiera interés en el extranjero, las comunidades indígenas podrían ver que sus
lenguas también son importantes para el mundo exterior, añade Sachse. “Es un
proceso de comunicación intercultural”, añade. Este aprendizaje, a la vez, es
de suma importancia. Si más tarde, en sus estudios, los estudiantes deciden
realizar trabajos de campo en distintas regiones, ellos podrán comunicarse con
gente de la comunidad y mostrar respeto por su lengua, al poder hablarla, y
así, respeto a los individuos de estas comunidades.
No hay comentarios:
Publicar un comentario