Francisca Serrano, autora de Hijo rico, hijo
pobre: 'El dinero no es malo, aprendámoslo de una vez'
Bolsamanía - febrero de 2015
¿Educan
igual los ricos a sus hijos que los pobres? No, claro que no. Pero ahora es
posible. Francisca Serrano, trader de éxito y autora de varias publicaciones
(Escuela de bolsa y Mueve tus ahorros y gánate un sueldo), vuelve a la carga
con 'Hijo rico, hijo pobre'. Un libro éste que se convertirá en una herramienta
familiar que ayudará a niños y adultos a tener una buena educación financiera
basada en el sentido común.Una publicación orientada a los padres que valoran
la educación, que quieren dar a sus hijos bases financieras sólidas para darles
una ventaja temprana en la vida. Porque en la era de la hiper información, un
buen contacto con el dinero es más importante que nunca. El inicio de la falta
de educación financiera se halla en este libro, que como siempre todo lo
recaudado con su venta irá destinado a la lucha contra el cáncer.P. Al ver el
título de su libro, "Hijo rico, hijo pobre", la relación con el
escrito por Robert Kiyosaki, "Padre rico, padre pobre", es inmediata.
¿Qué le ha llevado a escribir este libro? ¿Por qué ese título?Si tienes la
suerte de caer en una familia que tiene buena relación con el dinero tú también
la tendrásRespuesta de Francisca Serrano. Los títulos no los ponemos los
escritores. Los pone la editorial, pero aun así me siento muy honrada. Para mí
Robert Kiyosaki es uno de mis mentores. Yo me agarro a la segunda visión que
presenta este escritor, a la del padre rico, e intento a través de todo el
libro dar parámetros de cómo pensar de forma distinta sobre el dinero. De
hecho, hay personas que les toca la lotería y no son capaces de gestionarlo.
Esto va mucho en la relación que tengamos con el dinero. La pregunta es: ¿cómo
podemos tener una buena relación con el dinero? Evidentemente, desde pequeños.
Aprendiendo a tenerla de las personas que tenemos en nuestro entorno. Aquí
tenemos un hándicap: si tienes la suerte de caer en una familia que tiene buena
relación con el dinero tú también la tendrás. Pero, ¿qué pasa si caes una
familia que no la tiene? Pues que o tú tienes esa inquietud por aprender o te
vas a encontrar en la misma línea que la mayoría del mundo. Con el libro trato
de crear esa inquietud primero en los padres y, en segundo lugar, en los
hijos.P. Habla usted de la pirámide del éxito. ¿En qué consiste y cuáles son
las recetas principales para llegar a la cúspide?R. La pirámide del éxito es el
camino que hay que seguir, los primeros pasos a seguir que tendrían que seguir
tanto un adulto como un niño. Lo primero que tenemos que cambiar en la pirámide
del éxito son nuestras creencias, la forma de ver el dinero; tenemos que tener
un plan de acción con una meta clara; tenemos que empezar a ahorrar (el 10%
mínimo de los ingresos); tenemos que olvidarnos de las deudas malas; también
tenemos que educarnos financieramente; tenemos que aprender a invertir
conociendo el interés compuesto y sabiendo que el tiempo juega a favor de los
niños y en contra de los adultos. También tenemos que saber cómo generar
ingresos pasivos, nuestro plan B. Por último, en la cúspide de la pirámide está
el legado, que ojo no tiene porque ser tener muchos ceros en la cuenta. Cada
uno tienes sus expectativas.P. Profundizando en ese éxito, ¿cuáles son las
creencias limitantes que no permiten el éxito en cualquier proyecto sea el que
sea? ¿Por qué cree que es necesario que cualquier persona abandone su zona de
confort?R. Las creencias limitantes negativas vienen derivadas de ver muchas
quejas con respecto al dinero. Por ejemplo, esos padres que llegan a fin de mes
y no podía llegar y hablaba mal del dinero o de la gente que lo tenía. Esta
creencia entra en la cabeza de los niños. Vinculas dinero a algo malo cuando en
realidad el dinero no hace nada. No es ni bueno ni malo. Es el uso que las
personas hacen de él. Las creencias vienen de la educación que nos han dado.
Hay que cambiar el chip y empezar a ver el dinero de una forma positiva.Con
respecto a la zona de confort, 'quien no arriesga no gana'Con respecto a la
zona de confort, “quien no arriesga no gana”. Si tú no intentas buscar nuevas
vías, éstas no te van a venir a buscar a casa. Tienes que hacer algo, aunque
sea un pequeño movimiento. Cuando mis alumnos llegan a los cursos y me dicen
que quieren aprender, ya han salido por lo menos de su zona de confort. Tienen
la inquietud. Igual no llegan después a ser traders, pero ya tendrán cierta
educación financiera. Y los niños son los que más tienen que saber.P. ¿Qué es lo
que su hijo Sergio, de 10 años, sabe que la mayoría de las personas mucho
mayores que él desconoce? ¿Qué es lo mínimo, las pautas esenciales, que los
padres tienen que transmitir a sus hijos para formarlos en una buena educación
financiera?R. Sergio sabe que el dinero no es malo. Él sabe que puede ganar
dinero no sólo vendiendo su tiempo. Hay otros sistemas para ganar dinero que no
sólo vender tu tiempo a otra persona, que si tienes una buena idea y eres una
persona creativa, puedes montar mañana una empresa por internet. Con el juego
al juego de los emprendedores: le digo que se puede montar aquí que hace falta
en este sitio y entonces el empieza a pensar en algo que falta. Es el pensar
qué falta, qué necesitan los demás y qué puedo ofrecerles yo. El primer regalo
que le puede hacer un padre a su hijo es una hucha. Una hucha enseña al niño a
poner dinero aparte y empieza a tener un concepto de ahorro. Otro paso
importante es que cuando la hucha este llena y se rompa el cerdito sería una
buena idea hacer una fiesta con los papás, los niños y los abuelos para
acompañar al niño a abrir su primera cuenta bancaria. Le va a generar el
sentido de lo que está haciendo está bien. Hay que dejar que a veces los niños
paguen con sus ahorros. Que un día tu hijo te invite al cine con lo que ha
ahorrado para que sepa el esfuerzo que le ha costado ganarlo.Como pauta es
también muy importante la paga. Los padres tienen que saber cómo entregarla.
Hay que premiarles cuando hagan algo bueno y no sólo en lo referente a los estudios
que es su trabajo, sino cuando limpie el coche… También hay que jugar a juegos
de educación financiera, pero hay muchas más… El que el padre le hable a su
hijo de finanzas tiene que convertirse en un juego para los dos.P. El ahorro,
según usted escribe en su libro, es el pilar de nuestras finanzas. ¿En qué
radica su importancia y por qué habla de destinar un 10% de los
ingresos?Destinar un 10% de los ingresos es lo mínimo y es el pilar de tus
finanzasR. Destinar un 10% de los ingresos es lo mínimo y es el pilar de tus
finanzas porque si te surge un problema inesperado, por ejemplo una enfermedad…
El tener ese ahorro te puede salvar la vida. ¡Eso es brutal! El dinero
simplemente no es malo, es necesario. Tenemos que admitir que igual que un niño
aprende inglés o informática tiene que aprender sobre el dinero. Y lo primero
que hay que transmitirle es que no lo tiene que ver desde un punto de vista
peyorativo.P. ¿Cree usted que en España es necesario que niños y mayores
jueguen más al Monopoly?R. Da lo mismo que sea Monopoly como que sea cualquier
otro tipo de juego que despierte sus inquietudes. Es bueno, sobre todo, que los
padres y los hijos se reúnan para hacer los ejercicios que reflejo en mi libro,
jugar o simplemente hablar de dinero. En mi libro pongo un ejemplo más que
evidente: no es lo mismo que seas la hija de Warren Buffett que lo seas de una
persona con una profesión no vinculada al dinero. No por el dinero que tengas
ya acumulado gracias a tus padres, sino porque en tu casa se hablará de dinero,
lo que hable tu padre serán conocimientos y juegas con ventaja.P. Entrando en
la propia materia de inversión, no se puede invertir sin antes...R. Si antes
tener formación. Es vital. Tener formación te ayuda. Soy funcionaria de
profesión. Estoy en excedencia. Hace 12 años no sabía ni lo que era el Ibex 35
y ahora vivo de ello. ¿Mi educación financiera me ha ayudado? Evidentemente. Me
ha cambiado la vida.R. ¿Qué es la magia del interés compuesto y como puede
ayudarnos?El ser el más rico del cementerio no te lleva a nadaP. La magia del
interés compuesto nos puede ayudar cuando juega a nuestro a favor y no en
nuestra contra. Los bancos se hacen ricos por el interés compuesto. Utilizan
los intereses de las tarjetas de crédito a favor de ellos, gracias al interés
compuesto. ¿Por qué no vamos a empezar a utilizarlo nosotros? Por ejemplo,
entre el año 1991 y el 2014, el Ibex 35 ha tenido una revaloración del 10,91%.
Si lo hubiéramos metido en bolsa y no lo hubiéramos tocado ahora tendríamos una
fortuna. Tenemos que tener en cuenta que el dinero es como una pelota que cada
vez se va haciendo más grande. Si al principio conseguía un interés pequeño, la
pelota cada vez más grande. ¿Qué pasa si tú no tocas el dinero durante un plazo
de 20, 30, 40 años…? Si yo a mi hijo, que tiene diez años, le cojo 5.000 euros
y me paso cada año buscándole sitios donde la rentabilidad sea mayor al 10%...
¿Qué pasa? Cuando el niño tenga 30 años, 40 o 50 si quiere montar una empresa
tendrá dinero para ponerla, qué tiene capacidad para comprar acciones o
productos financieros, los moverá y seguirá creciendo su cuenta corriente. Ese
será su plan de pensiones. Su propio plan. Se lo habrá creado él.P. Por último,
la pregunta es obligada. ¿En qué consiste la fase del legado, cúspide de la
pirámide y por qué es tan importante?
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