La ciencia, otro apoyo para el 'método Bielsa'
y el Marsella
Agence France-Presse (AFP) - diciembre de
2014
Con repeticiones incansables y largas charlas
tácticas, el 'método Bielsa', que ha hecho al Marsella campeón de otoño en
Francia, dista de ser algo obsoleto, ya que se apoya en los últimos
conocimientos científicos para ayudar al desempeño de sus jugadores.
Se ha convertido en un hábito que en cada
entrenamiento los futbolistas marselleses lleven un chaleco poco elegante pero
que encierra un monstruo tecnológico. GPS, girómetro, acelerómetro...
"Esta caja mide sus desplazamientos, sus movimientos, la intensidad de sus
esfuerzos", explicó a la AFP Paul Boanas, jefe de la sección de Europa de
la compañía Catapult Sports, que construye, por 2.700 euros la unidad, este
aparato para el Marsella. "Permite, por ejemplo, ver el tiempo que se pasa
en el aire en cada salto, o las estiradas de los porteros", añade Boanas.
El Olympique, como el AC Milán, la selección
sueca de fútbol o el ASM Clermont y el RC Toulon de rugby, según la página web
de la empresa, almacena después los datos para medir mejor el nivel de forma o
la aportación en el juego de los futbolistas.
"Eso permite monitorizar las zonas de
juegos, pero también verificar el nivel de forma de los deportistas, asegurar
que no se exprimen demasiado en los entrenamientos y llegar fatigados al
partido, o incluso dar la señal de alarma en caso de lesión, si la carga de
trabajo es muy elevada", prosigue el empresario.
- Carreras y posesión -
La capacidad de resistencia física es algo
esencial en el fútbol moderno y una ventaja más en el sistema de juego
dispuesto por Marcelo Bielsa, construido a base de posesión, repetición de
esfuerzos y de agresividad sobre el portador del balón.
"Ningún equipo ha corrido tanto como el
Marsella desde el inicio del campeonato", apuntó el técnico argentino
antes de la batir al Lille el domingo pasado en el Velodrome. Las estadísticas
de la LFP desvelan otra realidad: en sus 19 partidos de la primera vuelta, el
Marsella siempre ha tenido más el balón que su rival, incluido el París
Saint-Germain, con una media del 56,7% de posesión, que asciende al 59,6% en
los últimos cinco partidos.
Para permitir semejante desgaste de energía en
los partidos, los jugadores hacen un gran trabajo en el campo de entrenamiento.
A principios de diciembre, Florian Thauvin
explicó que sus actuaciones deslucidas del principio de la temporada se
debieron a un problema físico: su cuerpo "no estaba listo para asumir
todos los esfuerzos" exigidos por Bielsa, y necesitó "un poco de
tiempo" para adaptarse.
Para solucionar esto, el Marsella fichó en
junio, a petición de Bielsa, al belga Jan Van Winckel en el puesto de
preparador físico. Tras pasar por el club saudí Al-Ahli, este universitario es
sobre todo autor de un libro sobre la puesta en práctica de los conocimientos
científicos en el fútbol ('Fitness in soccer') y cofundador de Topsportlab, una
empresa especializada en la gestión de esfuerzos.
Y, pese a que no es posible establecer el
efecto directo, hay que reconocer que el OM ha sufrido pocos contratiempos
físicos importantes, al contrario que otras formaciones de la Ligue 1. Solo
Mario Lemina (esguince de tobillo), Jeremy Moral (esguince de rodilla), Andre
Ayew (abductores), Romain Alessandrini (esguince de tobillo) y Abdelaziz
Barrada (abductores) ha sufrido lesiones significativas.
- Trabajo de hormiga -
Esta 'solidez' del equipo es también la
consecuencia de una racionalización de los esfuerzos, que es donde entra el
vídeo. "En cuanto al análisis de vídeo, Marcelo Bielsa ha llegado con sus
propios métodos y lógicas", explicó a la AFP Thomas Schmider, director
ejecutivo de Prozone-Amisco, socio desde hace tiempo del Marsella y que se
sirve del vídeo para recopilar las estadísticas en los partidos.
Pero, el objetivo es parecido al de Amisco, ya
que "es en un partido donde los esfuerzos son más intensos, donde los
cambios de sistema de juego son más frecuentes y rápidos, o donde se producen
la mayoría de las lesiones", explica Schmider.
Como los jugadores no pueden llevar un GPS, son
las cámaras las encargadas de registras sus movimientos antes de ser
recopiladas para ser revisadas por los jugadores y Bielsa para corregir errores
de movimiento y de elecciones ofensivas. "Visiona todos los
partidos", explicó Andre-Pierre Gignac a mediados de diciembre. "Lo
que no hemos hecho en el partido anterior, lo haremos en el entrenamiento y
repetirlo hasta que salga bien", añadió. Nada revolucionario, seguro.
Pero, tras la primera parte de la temporada del Marsella y con el apoyo de la
ciencia y el espíritu insuflado por Bielsa, este trabajo de hormiga está lejos
de perjudicar la actuación del equipo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario