Centroamérica, clave para la industria
farmacéutica en AL
Forbes - martes, 31 de marzo de 2015
Farmacéuticas globales como Pfizer y
AztraZenaca observan nuevas oportunidades de crecimiento en la región, luego de
un esfuerzo de las autoridades por atacar los males del siglo XXI y mejorar sus
legislaciones.
Luego de la crisis financiera de 2008, la
industria farmacéutica en Centroamérica ha recuperado el crecimiento de doble
dígito que mantenía desde 2001 y que era sostenido, principalmente por la
atención regional de las patologías recurrentes y por el peso e importancia que
los grandes laboratorios globales le dieron al istmo años atrás.
Un lustro después, el sector ha recuperado
terreno pero, al mismo tiempo, se ha enfrentado a nuevos retos y circunstancias
derivadas de la misma expansión mostrada. Aun así, las perspectivas son
positivas.
Guatemala es el máximo exportador de la región
en la industria química e industrias conexas, con un valor en 2014 de 659
millones de dólares (mdd), de acuerdo con cifras del Sistema de Estadísticas de
Comercio de Centroamérica de la Secretaría de Integración Económica
Centroamericana (SIECA). Le siguen Costa Rica con 399.9 mdd y Honduras con
393.6 mdd del valor exportado originado por el sector químico e industrias
conexas.
Juan Rivera Martínez, especialista en el sector
y quien actualmente trabaja en el laboratorio colombiano Tecnoquímicas con
presencia en El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá, y que
adquirió en 2013 a la compañía Wasser Chemical y la marca Hidraplus de Baxter,
explica en su calidad de analista que han sido varios factores los que han
impulsado el crecimiento farmacéutico de la región.
“Centroamérica para la industria farmacéutica,
luego de la crisis de 2009, vuelve a crecer a dos dígitos; su crecimiento
compuesto en los últimos cuatro años ha sido de 42%, llegando a los 1,800 mdd,
aunque no todos los países se comportan de la misma forma, la región se ha
convertido en el mercado donde las grandes multilatinas potencian su
crecimiento”.
El mercado, dice el especialista, maneja
prácticamente la misma pirámide de patologías de siempre, “con la diferencia de
que las marcas copia (o similares) son el segmento que no sólo más crece, sino
que va ganando market share (participación de mercado), pasando de 39% en 2009
a 41% en 2013”.
Rivera señala que una de las razones por las
cuales el crecimiento bajó en los últimos 10 años, fue que las autoridades de
salud de Centroamérica y sus gobiernos no comprendían la importancia del
sector, “ahora es diferente, ya que hemos venido observando cambios importantes
en normatividad y procesos que permiten el desarrollo de la competitividad”.
Otra área de oportunidad para los grupos
farmacéuticos es la relacionada con las enfermedades prevalentes en la región
como las crónicas del tipo cardiometabólico, diabetes y otras derivadas del
sistema nervioso central, principalmente.
Un metabolismo dinámico
El mercado farmacéutico centroamericano ha
estado muy activo en adquisiciones o joint ventures en Guatemala. Por ejemplo,
en 2013 la brasileña Eurofarma adquirió a la guatemalteca Laprin; la empresa
carioca ha invertido en los últimos cinco años más de 1,500 mdd destinados a su
expansión en la región. En 2013 se concretó la adquisición de la farmacéutica
salvadoreña Teramed por parte de la colombiana Tecnoquímicas por más de 30 mdd.
Rodrigo Fernández, presidente de AstraZeneca
para Centroamérica, el Caribe, Perú y Ecuador, considera que el istmo
centroamericano representa hoy en día una región altamente atractiva para el
desarrollo del sector farmacéutico, en general, y del portafolio de
AstraZeneca, en particular.
Asegura que el istmo representa alrededor de 7%
de la venta total del laboratorio en Latinoamérica y que esto responde a
factores como el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) regional y a que
los gobiernos actuales están cada día más preocupados por los aspectos de salud
de la población, dado que hay pacientes con necesidades que van desde las muy
básicas hasta otras muy avanzadas como enfermedades cardiovasculares, diabetes
o cáncer, entre otras.
AstraZeneca inició operaciones en Centroamérica
en 2003 cuando abrió una oficina regional en Costa Rica dedicada a dirigir los
trabajos del istmo y del Caribe con una inversión en ese entonces de 15 mdd;
anteriormente el laboratorio sólo operaba como subdistribuidor.
La meta original, de acuerdo con información de
aquel año, era triplicar los 20 mdd anuales en ventas; para 2009 la cifra era
de casi 38 mdd y en 2013 superaron los 56 mdd en ingresos, de acuerdo con
información de IMS MAT.
En el mismo sentido se manifestó Roberto Rocha,
gerente general de Pfizer para Centroamérica y el Caribe; con más de 60 años en
la región, el mercado centroamericano representa para esta farmacéutica 6% de
sus ingresos latinoamericanos.
Rocha recuerda que Pfizer seleccionó a Costa
Rica como sede para servicios financieros especializados. Menciona que entre
las principales actividades y transacciones que se atienden desde ese país se
encuentran la gestión de pagos a proveedores, reportes contables y tesorería.
La Federación Farmacéutica de Laboratorios
Farmacéuticos (Fedefarma), la cual representa a las empresas farmacéuticas de
investigación y desarrollo que operan en el istmo centroamericano y el Caribe,
tiene como asociados a las principales firmas globales: Abbott, Abbvie, Astra
Zeneca, Bayer, Boehringer-Ingelheim, Eli Lilly, Ferrer, GSK, Janssen- Cilag,
Menarini, Merck, MSD, Novartis, Pfizer, Roche y Sanofi.
Pero especialistas consultados por Forbes
aseguran que el abanico de empresas farmacéuticas es mucho más amplio, pues
existen 670 empresas operando actualmente, aunque “sólo 50 compañías tienen 80%
del mercado, y esto no ha cambiado en los últimos años, el escenario de
participación de mercado se mantiene dominado por las firmas globales, dejando en
un segundo plano a las empresas locales principalmente con la industria de
genéricos”.
De acuerdo con los números más recientes de
IMSHealth, se señala que los cinco primeros laboratorios por ventas en
Centroamérica son Abbott, Pfizer, Sanofi-Aventis, Merck y Novartis Pharma.
Todas ellas dominan en conjunto más de 25% de la participación de mercado
total.
Le siguen en la lista MSD, GlaxoSmithKline,
Menarini, la local Unipharm-Pharmanov y Bayer Healthcare.
Por lo que respecta a la composición del
mercado privado en Centroamérica por país, Guatemala y Costa Rica encabezan la
lista con 25% y 24%, respectivamente, seguidos por Honduras, El Salvador,
Panamá y Nicaragua.
Sector pide vitaminas
A pesar de que las perspectivas son buenas para
el sector hacia el futuro inmediato y a largo plazo, la convivencia entre los
corporativos farmacéuticos y los gobiernos centroamericanos ha tenido que
sortear diversas dificultades en varios momentos de su historia derivadas de
situaciones relacionadas al control de precios o la propiedad intelectual.
Hace apenas un año y medio, por ejemplo,
empresas asociadas a la Federación Centroamericana de Laboratorios
Farmacéuticos (Fedefarma) amagaron con retirar del mercado salvadoreño casi 40
de sus principales medicamentos.
La controversia inició cuando el reglamento
para determinar precios de venta máxima, derivado de la Ley de Medicamentos de
El Salvador, obligaba a las empresas a vender dichos productos a un precio de
venta al público, inclusive por debajo de sus costos de producción.
Los razonamientos de la Fedefarma consistían en
que la ley referida no marcaba diferencias entre las medicinas con patente y
las genéricas, ya que las ubicaba en un mismo paquete al momento de fijar los
precios de venta final.
El tema llegó incluso a la Oficina del
Representante Comercial de Estados Unidos, que mantenía en la versión final
2013 del Reporte Especial 301, a El Salvador bajo un monitoreo del progreso en
la efectividad de sus leyes, principalmente en protección de propiedad intelectual
e inversiones.
Los especialistas señalaron que esta medida de
control de precios se extenderá a toda la región. Rivera comenta que inició en
Nicaragua, continuó en El Salvador y que Honduras y Costa Rica quieren entrar a
este esquema.
Recordó que Costa Rica fue el país que tuvo un
mayor incremento de precios en los últimos tres años, “esto va directo sobre
las utilidades de las empresas farma quienes reducen inversión y contratación
de nuevo personal, obviamente el control va dirigido hacia una disminución del
precio de venta al consumidor”.
Un tema que en el caso de avanzar propiciaría
certidumbre y confianza a las empresas extranjeras y locales es el registro
sanitario único, que permitiría que un fármaco determinado pueda distribuirse
en toda la región con un solo permiso. Sin embargo, este asunto avanza
lentamente y no se ve —de acuerdo con las propias farmacéuticas— que tenga una
pronta resolución.
Otro problema que pega al sector farmacéutico
en Centroamérica es el relacionado con el contrabando y la falsificación de
medicamentos, de acuerdo con el gerente general de Pfizer para la región,
Roberto Rocha. “El contrabando y la falsificación de medicinas es un grave
problema. Al respecto, Pfizer busca junto con los gobiernos modelos para evitar
y acabar con ello, es un tema bastante difícil de contabilizar y no me
arriesgaría a decir cuánto representa el impacto en dólares; este fenómeno es
más común en República Dominicana, Panamá y Nicaragua”.
Según información emitida por la Organización
de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, la comercialización de
medicamentos falsos a nivel global representa 10% del mercado. En Centroamérica
los porcentajes serían similares.
Futuro con anabólicos
El presidente de AstraZeneca en Centroamérica
considera que las perspectivas para su firma y para el sector en general son
positivas, opina que“el mercado farmacéutico en Centroamérica ha venido
creciendo bastante en línea con las economías de los países de la región
latinoamericana, estamos hablando de economías que crecen entre 4% y 5% anual”.
“En el área cardiovascular, por ejemplo,
ofrecemos productos de vanguardia como Crestor para el colesterol, Atacand que
es de nuestra familia de antihipertensivos o más recientemente el lanzamiento
en Centroamérica de Brilinta para los pacientes con síndrome coronario agudo”,
describe el presidente de AstraZeneca.
“Otra área en donde estamos penetrando con
productos muy innovadores es en el tema de la diabetes, traemos productos como
Forxiga que es una nueva clase de medicamento para su tratamiento, lanzado
originalmente en Europa y Estados Unidos, y que ahora ya está en Centroamérica.
Recordó que la diabetes es una enfermedad que
en Centroamérica tiene prevalencias de hasta 10% y cobra tantas vidas o más que
el cáncer.
Pfizer apuesta por Centroamérica no sólo
instalando su centro neurálgico operacional, sino también fortaleciendo su
presencia con médicos a través de acciones de información y promoción.
La apuesta de Pfizer se basa en productos como
Prevenar 13, vacuna indicada para la inmunización activa y la prevención de
enfermedades causadas por la bacteria del neumococo; Enbrel, medicamento que
busca aliviar síntomas como el dolor y la rigidez ocasionada por la artritis
reumatoide; Lipitor que reduce los niveles de LDL (colesterol “malo”) y los
triglicéridos en la sangre; Lyrica, indicado para el tratamiento de la
fibromialgia (un síndrome doloroso generalizado); Viagra desarrollado para
tratar la disfunción eréctil, y Altruline, antidepresivo de nueva generación,
entre otros.
Rocha explica que el tema de la distribución
del mercado farmacéutico se está transformando. La verticalización del mercado
entre los distribuidores y las cadenas de farmacias empieza a tomar un rol
importante, “están entrando las cadenas de farmacias que están transformando la
dinámica comercial”.
Los entrevistados coincidieron en señalar que
Centroamérica se ha convertido en un mercado muy atractivo para el sector
farmacéutico, más por su potencial que por su tamaño geográfico desde el punto
de vista de una integración regional, ya que brinda diferentes oportunidades y
nichos de mercado acorde a la realidad socioeconómica de cada uno de los países
que la integran.
No hay comentarios:
Publicar un comentario