Modelos de negocios en la era de la analítica
FORBES- 13 de septiembre de 2018
En publicidad hay un sin fin de
oportunidades, por ejemplo, en el ramo de bebidas dado el uso de botellas
inteligentes con chips que permiten un análisis de patrones de compra y
consumo.
La dinámica del entorno social y
tecnológico, así como el importante volumen de datos que se genera segundo a
segundo, inciden cada vez más en una imperante necesidad de análisis de la
información para una toma de decisión más estratégica dado que se puede con
mayor objetividad observar comportamientos y tendencias que coadyuven a una
comprensión más objetiva de fenómenos sociales y económicos, por ejemplo.
A diferencia del pasado, las
capacidades de obtención y procesamiento han permitido que el análisis de datos
evolucione pasando del registro de lo que está aconteciendo en la empresa o a
sus productos y servicios a través de la analítica descriptiva a explicar el
por qué sucede vía la analítica de diagnóstico, lo que podría llegar a pasar
vía la analítica predictiva hasta, qué se recomienda estratégicamente hacer,
vía la analítica prescriptiva. Todo ello implica entonces un parteaguas en la
toma de decisión al poder ésta contemplar la modelación de diferentes
escenarios, no sólo bajo la identificación de factores y su incidencia, sino en
el poder hacer proyecciones.
Gran parte del reto radica en la
capacidad que se tenga de procesar información que no está estructurada la cual
en tan solo 5 años tuvo un incremento mayor a 800% en su volumen. No debemos
olvidar que este tipo de datos se generan a partir de sensores, imágenes,
audio, video y texto. Lo que conlleva el poder realizar desde mantenimientos
preventivos en equipos de producción hasta el poder detectar emociones, realizar
reconocimientos faciales y registrar patrones de movilidad en los clientes por
ejemplo.
Todo ello implica que hoy sea más
fácil hacer modelaciones, proyecciones y por ende planeaciones de demanda de
productos y servicios, donde se puede de manera más precisa realizar mediciones
de impacto de campañas, un mejor manejo de las redes sociales así como poder
tener mayor precisión a la hora de definir portafolios de productos con ofertas
nuevas o existentes para mercados particulares, puntualizar más la discriminación
de precios y ofrecer a los clientes soluciones más coincidentes con sus
búsquedas o intención de las mismas. Imaginemos por ejemplo la industria
hotelera utilizando tecnologías de reconocimiento facial y detección de
emociones y en donde en el caso de un cliente antes de que éste haga el
check-in se pueda saber su estado de ánimo, si necesita el servicio inmediato
de alimentos, por mencionar sólo algún caso en particular.
El gran reto ya no es la
generación de información particularmente, sino cómo administrarla y
procesarla. Tan solo para el 2020 se espera que existan alrededor de 5 aparatos
inteligentes conectados por persona generando información a través del Internet
de las Cosas, lo cual representaría alrededor de 40 a 50 billones de dispositivos
que continuarían evolucionando y reconfigurando modelos de negocios existentes
desde la industria automotriz, hasta el comercio al minorista implicando una
mayor comprensión y conexión con el mercado de consumo, pasando de una
tradicional y convencional forma de segmentación de mercado a una profunda
comprensión de comportamientos en tiempo real del uso y patrones de consumo de
productos y servicios. Por mencionar un caso, en materia de publicidad hay un
sin fin de oportunidades como por ejemplo en el ramo de bebidas dado el uso de
botellas inteligentes con chips que permiten un análisis de patrones de compra
y consumo con cero sesgo lo que permitirá a las marcas y sus productos tener
una mayor y más directa conexión con el mercado de consumo.
Por igual, para las tiendas de
ropa esto detona grandes oportunidades de negocio y alcance de cobertura de
mercado al poder los potenciales clientes a través de la realidad virtual y la
realidad aumentada acceder a sus catálogos y tener la posibilidad de virtualmente
probarse un gran número de prendas. De acuerdo con un estudio de McKinsey casi
el 50% de los esfuerzos en materia de estrategia digital de las empresas se
encuentra en sus áreas de Mercadotecnia y distribución y de acuerdo con
Deloitte en la actualidad en promedio las empresas que tienen modelos de
negocios más innovadores con componentes digitales llegan a ser hasta 30% más
rentables que el resto. De aquí la importancia de transformar y reinventar
modelos y procesos de negocios tradicionales en la era de los grandes volúmenes
de datos y más allá en la era de los datos inteligentes, donde el primero
representa un mercado de más de 50 billones de dólares.
No hay comentarios:
Publicar un comentario