Soluciones en la nube: beneficios, riesgos y
tendencias
Forbes México - martes, 14 de octubre de
2014
¿Por qué tu empresa debe considerar soluciones
de software como servicio en la nube? En primer lugar, porque requiere una
menor inversión de capital.
Cada día son más las empresas que utilizan
soluciones de negocios en la nube. Sin embargo, el proceso de adopción ha sido
gradual y no todos los departamentos de sistemas entienden a profundidad los
posibles beneficios a obtener y riesgos a controlar al adoptar una solución de
este tipo.
En este artículo me enfocaré específicamente en
la modalidad de soluciones en la nube conocida como SaaS (Software as a
Service) –en castellano, software como servicios–. Hay otras modalidades de
servicios de cómputo en la nube como infraestructura, como servicios o bien plataforma
como servicios, que en esta ocasión no serán objeto de reflexión –aunque
existen similitudes importantes.
Empecemos con los beneficios. ¿Por qué una
empresa debe considerar soluciones de software como servicio en la nube?
En primer lugar, una solución en la nube
requiere una menor inversión de capital. Estas soluciones no requieren invertir
en infraestructura o licenciamiento para utilizarse. Prácticamente todo el
consumo de las mismas es bajo la modalidad de renta. Una renta inclusiva que
engloba todo lo necesario para utilizar la aplicación y que también la mantiene
actualizada en el tiempo.
En segundo lugar tendremos un menor costo
interno de operaciones de TI. El proveedor se encarga de mantener la solución a
punto y de ofrecernos una garantía de disponibilidad mediante un acuerdo de
nivel de servicio que estipula un nivel máximo de falla por periodo de tiempo.
La mayoría de estos acuerdos hoy día exceden al menos un 99.9% de
disponibilidad. Internamente no tendremos que preocuparnos por tareas como
monitoreo de bases de datos, respaldos, mantenimiento de equipos,
almacenamiento, actualizaciones de sistema, etcétera.
En tercer lugar, la mayor parte de los
proveedores de soluciones de software en la nube nos permiten probar antes de
comprar. Normalmente podremos conocer el funcionamiento de la solución y
operarla en nuestro negocio con usuarios o funcionalidad limitada por algún
tiempo. Así minimizamos el riesgo de hacer una adquisición que no nos funcione.
En cuarto lugar, estas soluciones tienden a
acumular la experiencia de varios clientes. Con las mejores soluciones podremos
conocer cuáles son las prácticas óptimas utilizadas en el mercado para nuestro
ámbito de negocio. Una solución de este tipo se enriquece continuamente con las
necesidades de todos los clientes que la utilicen. Es muy probable que esto nos
permita encontrar formas de optimizar nuestro negocio más allá de lo que
originalmente teníamos contemplado.
En quinto lugar, normalmente se accede a estas
soluciones a través de Internet y desde cualquier lugar. Nuestros colaboradores
pueden acceder a la solución desde donde se encuentren sin que nos tengamos que
preocupar por infraestructura propia de redes y control de acceso.
Finalmente, sobre todo si somos una
organización mediana o pequeña, es altamente probable que las prácticas de
seguridad de la información y continuidad de negocios del proveedor sean más
completas que las que tenemos internamente.
Sin embargo, no todo es color de rosa con las
soluciones de software en la nube. También hay riesgos importantes que nos
tenemos que asegurar que sean atendidos correctamente por el o los proveedores
que elijamos.
El primero de ellos es asegurarnos que la
solución elegida tenga adecuadas prácticas de seguridad de la información. Al
concentrar los datos de múltiples clientes en un solo punto, un proveedor SaaS
se vuelve un punto de ataque más atractivo. Por esta razón debe haber sólidas
prácticas de seguridad implementadas y auditables. Pregunte a su proveedor
información lo más detallada posible acerca de sus prácticas de seguridad.
Muy relacionado con el punto anterior es el de
las prácticas de privacidad de los datos. ¿Cómo se asegura el proveedor de la
solución de que su información bajo ninguna circunstancia pueda ser obtenida
por terceros? ¿Cómo protege su información del acceso por parte de empleados
del mismo proveedor?
Un tercer aspecto a vigilar es si en el
contrato de servicios no se le otorgan derechos de propiedad o explotación de
su información al proveedor de la solución. ¿Puede utilizar su información? Es
importante revisar con detalle los términos contractuales, de tal forma que se
sienta cómodo con el nivel de acceso planteado.
Otro tema a considerar es qué sucede si
deseamos extraer toda nuestra información para poder cambiar de proveedor en el
futuro. Es fundamental que mida cómo podría usted descargar toda su información
en algún formato relativamente estándar que le permita migrar a una solución
distinta en el futuro. Este problema también existe en soluciones de software
que no están en la nube. En general, debe elegir bien a su proveedor, ya que
seguramente trabajará con él varios años, especialmente si su solución es de misión
crítica.
¿Cómo garantiza el proveedor la continuidad de
operaciones? Aun cuando exista un acuerdo de nivel de servicio, usted puede y
debe preguntar qué medidas tiene el proveedor implementadas para hacer realidad
ese nivel de servicio.
Considerando los anteriores riesgos y
beneficios, ¿debe usted de participar y usar soluciones de software en la nube?
No hay una respuesta universal; sin embargo, sí podemos repasar las principales
tendencias que reconocidas empresas de consultoría en este mercado vienen
observando a nivel mundial.
De acuerdo con RightScale, en una encuesta
realizada a 1,068 profesionales de tecnologías de la información se encontró lo
siguiente:
Por otro lado, PwC predice un crecimiento anual
de 21.3% en las compras de software como servicio en la nube hacia el 2016
comparado con tan sólo 2% para el mercado de servicios TI en general. Para ese
año se estima que más de la cuarta parte del gasto total en soluciones en el
mundo ya sea bajo este modelo.
Las soluciones de software en la nube son la
mejor opción para la mayoría de las organizaciones. Su tasa de crecimiento
sostenida de más del 100% los últimos tres años, indica que estamos en lo
correcto.
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